Escuela para aprender libertad

Los colaboradores de El Norte de Castilla Yolanda Izard y José Antonio Abella presentaron en la Plaza Madrid el facsímil compuesto por estos trece cuadernillos de los niños burgaleses; seis de 'Gestos', tres de Recreo y cuatro especiales, vertebrados en torno al mar, a los sueños, al folclore burgalés (el más extenso, de 52 páginas, frente a los restantes de 24) y al Retratista. Los Gestos los definía así el maestro Benaiges: «Carácter. Expresión libre. Matiz. Vida. Atributos todos de la Escuela». Recreo, por su parte, correspondía al periódico de los alumnos de menor edad.

Abella, que fue médico en Bañuelos de Bureba durante cinco años, explica que muchos de estos cuadernillos hubieron de ser reconstruidos en esta personal reedición y maquetación, que recogen las libres palabras de los jóvenes niños con base en «sus propios intereses, su vida, las cosas de su entorno o su pueblo», siguiendo con fidelidad las doctrinas de la técnica de Freinet. Nacido en Francia, este método educativo descansa sobre la base de tres principios: la creación de textos libres elegidos por los propios niños, su edición en una imprenta manual antigua (en este caso particular, imprimido sobre planchas de linóleo con una rústica maquinaria que incluía los negativos de los dibujos hechos con las gubias), y su difusión a lo largo del mundo: los cuadernillos de Bañuelos llegaron a Cataluña, Extremadura y al Palacio Real destinados al mismísimo Alcalá Zamora, pero también a Bélgica, Francia y Argentina.

«Para unos niños aislados del mundo, en un pueblo con camino y sin carretera, recibir una carta con otros cuadernos de todas partes del mundo era una emoción, un gran aliento, un estimulo para aprender», enumera Abella. «Era un método innovador para la época, verdaderamente sorprendente», ponderó Izard.

Hoy solo quedan dos personas vivas que puedan recordar cuando el maestró llegó a lo que entonces era una localidad de cerca de doscientos habitantes (en la actualidad no llegan a cuarenta). En 1934 pisaba Benaiges suelo burgalés, y durante los cursos que ocuparon los años 1935 y 1936 se esforzó porque los alumnos de su escuela (con E mayúscula) hicieran esos cuadernos y explorasen sus perspectivas personales de lo que era la educación, el entorno cercano y el propio mundo. Significativa resulta la colección de textos vertebrados en torno al mar de quienes jamás lo habían visto, en un rabioso ejercicio de creatividad e imaginación. Fue entonces cuando el profesor juró a sus alumnos, que por entonces contaban entre seis y trece años, que les llevaría a conocerlo, quizá a alguna costa catalana. Una promesa que la sublevación franquista terminó por frustrar.

Según los datos que manejan las investigaciones desarrolladas por el propio Abella, el profesor fue asesinado en Briviesca, a diez kilómetros del pueblo, el 19 de julio de 1936, pocas horas después del alzamiento golpista. Pero desdeña lo que da en calificar como «literatura lacrimógena», que insiste en que Benaiges fue asesinado por ser un gran maestro: «La verdad es que se significó mucho como miembro de la izquierda», indica el editor y artista. «Hay algunas informaciones, si bien resultan poco claras o directamente contradictorias, que le apuntan como presidente de la Casa del Pueblo, aunque es cierto que colaboró en La Voz de Bureva con artículos muy críticos con el sistema. Había muchos que le tenían ganas».

La publicación de 'Escritos de vida', surgida a partir de una iniciativa de un exalcalde de Bañuelos, Jesús Viadas, busca obtener con los beneficios de su venta la restauración total de la escuela del municipio. Desde 2013 se encuentra constituida además una asociación volcada a tales fines, tanto el de la reconstrucción y recuperación de esta escuela destruida como el de la reivindicación de la figura de este profesor y su método educativo basado en la libertad.

Bajo el título genérico 'Tiempos de guerra y posguerra' se concatenarán tres actos amparados por el paraguas de Comisiones Obreras y la fundación Jesús Pereda que vinculan la recuperación de la memoria histórica a través de actos culturales, y que se desarrollarán desde este pasado miércoles hasta el 22 de junio. La presentación de 'Escritos de vida' ha supuesto el arranque de esta serie de encuentros, los cuales «buscan trascender lo exclusivista o elitista de la cultura y visibilizar su relación con los movimientos sociales como algo que sabe estar vivo», explicó Gonzalo Francoblanco, escritor y representante de la organización de estas jornadas.

«El acto de Benaiges tiene que ver con el mundo del trabajo, la enseñanza es el elemento transformador primordial de la sociedad», explicó, «y cómo un hombre se empeñó en que los niños pudieran desarrollarse como tal antes de ser mayores».

El título 'Tiempos de guerra y posguerra' alude a su vez a ese paso de la educación progresista a la tradicional católica, a aquellos niños y a sus padres «que continuaron sin posibilidad de disfrutar de una libertad política o sindical». El viernes tendrá lugar el concierto 'Blues castellano', en el que Cova Villegas y Delta Galgos musicalizan el libro homónimo de Antonio Gamoneda, y el sábado se proyecta el documental 'Sueño de libertad. Presos de la memoria', sobre la represión de presos del franquismo a través de testimonios como el del poeta Marcos Ana.