Carolina Pecharromán acerca la realidad de las primeras periodistas españolas

«El libro indaga sobre la realidad de aquellas mujeres que hicieron periodismo, cuántas fueron en España más allá de los casos que se suelen acreditar, y si estuvieron o no a la altura de otras homólogas de Francia y Reino Unido», explica la escritora. Los territorios escogidos no son por azar; «la primera es patria de la revolución y las ideas, mientras que la segunda es cuna de la economía y la Revolución Industrial».

Así, la obra analiza la evolución de aquellas reporteras que empiezan a escribir desde 1850 y hasta 1931; «pues la II República es un periodo ya ampliamente estudiado», apunta Pecharromán, y en ella se recogen cómo se desarrollaron con el contexto social de España, qué escenarios y dificultades afrontaron o cómo fue la actitud hacia ellas: «Se trata de conocerlas pero también de entenderlas; qué se esperaba que hicieran, qué se esperaba que no hicieran, si fueron o no transgresoras...», enumera la autora.

Algunas de las conclusiones del libro es que «las archicitadas Concepción Arenal, Carmen de Burgos o Emilia Pardo Bazán no fueron figuras excepcionales, sino que había muchas más como ellas», resume la escritora. En Castilla y León, destaca dos figuras como Matilde Cherner o Consuelo González Ramos, y cómo ellas, al igual que la parte femenina del gremio contemporáneo, «consiguieron hacer del periodismo una profesión; algo excepcional dada la poca educación que recibían o cómo tenían que escribir desde casa, ya que estaba mal visto que salieran a cubrir noticias».