La Biblioteca Nacional 'libera' obras de seis autores de Castilla y León a los 80 años de su muerte

Entre los académicos, novelistas, teólogos, músicos, poetas o abogados que figuran en este listado de autores, seis son de Castilla y León. Uno de ellos es el poeta valllisoletano Zacarías Ylera Medina (1878-1943), licenciado en Derecho Civil y Canónico, fue director del Hospital de la Resurrección, del psiquiátrico y jefe de Negociado de la Diputación de Valladolid. Con motivo del centenario de su nacimiento, la Casa Cervantes le rindió un homenaje. Colaboró asiduamente en prensa, en El Norte de Castilla entre otros diarios, así como en publicaciones artístico literarias como 'Juventud castellana' y 'Revista castellana'. La Biblioteca Nacional ha liberado y colgado en su web 'De la vida a la estrofa' (1913).

Ylera Medina se hizo con el áccesit de los Juegos Florales de Valladolid en 1906 y su etapa literaria más fecunda abarca desde 1905 a 1942, con relatos como 'Nido sin aves' o el poemario 'Ciento seis sonetos'. Entre sus obras publicadas figura 'Iris' (1906), un conjunto de relatos editados junto con 'Inquietudes', el poemario 'Amapolas', 'La cabrera de Vegapujín' (1914), poema narrativo sobre la tradición oral vinculada a elementos sobrenaturales, o 'Del parnaso catalán' (1929). Tras su muerte, su hijo, el pintor Fernando Ylera publicaría 'El cisne canta' (1978), según refleja Herminia Hernández García en un estudio sobre la correspondencia inédita de Zacarías Ylera Medina.

Otro autor vallisoletano con obra liberada es el peñafielense Recaredo Fernández de Velasco (1889-1943). Licenciado en Derecho por la Universidad de Valladolid, obtuvo la cátedra de Derecho Administrativo por la Universidad de Murcia en 1919 para regresar a Valladolid en 1941. «La BNE tiene catalogadas trece obras suyas, entre ellas 'La doctrina de la razón de Estado en los escritores españoles anteriores al siglo XIX', además de contar con dos cruiosos trabajos sobre el tiranicidio, 'Apuntes para un estudio sobre el tiranicidio y el Padre Juan de Mariana' (1919) y 'Referencias y transcripciones para la Historia de la Literatura política en España'«, observa Julio Fernández-Sanguino, interesado en la obra del autor vallisoletano, quien llegó a ser rector de la Universidad de Murcia y alcalde de esa ciudad.

En la nómina de autores de la comunidad cuya obra goza ya de acceso público figura también el palentino Marcelo del Niño Jesús (1873-1943), carmelita descalzo y filósofo. Su principal obra, 'Apuntes históricos sobre la Filosofía en la Orden Carmelitana', fue publicada en 1928. También escribió 'La cuestión social en las encíclicas Rerum novarum y Quadragesimo anno'.

Del jesuita leonés Mariano Gutiérrez Lanza (1865-1943) se sabe que fue pionero de la meteorología, astrónomo y sismólogo. Está enterrado en el cementerio de Colón en La Habana. Entre otras universidades, estudió en la de Georgetown, en Washington. El 13 de enero de 1910 realizó la primera observación desde suelo cubano del cometa Halley. En uno de sus trabajos, 'Un huracán sin precedentes', registró uno de los mayores ciclones que sufrió la isla en 1924. También publicó 'Los huracanes en las Antillas' (1928).

Guillermo Hernanz Blanco (1915-1943), nacido en la localidad segoviana de Sepúlveda, publicó un diario de batalla de su experiencia con la División Azul en Leningrado, donde se le dio por desaparecido. Llegó a la imprenta 'Diario de Guillermo en Rusia, 1942' (Ediciones 19), relato de un joven oficial de Artillería recién salido de la Academia de Segovia que describe su peripecia personal hasta su desaparición en la batalla de Krasny Bor, en las cercanías de San Petersburgo (entonces Leningrado), según describe un amigo suyo en una carta. El libro se publicó en 2014.

También de Segovia es el poeta y filólogo Eliseo Viejo Otero, nacido en la localidad de Arevallillo de Cega, miembro del Instituto Nebrija del CSIC y del SEU, autor de 'Versos del mar y la montaña' (1941) y 'El elemento humano en la obra de Marcial' (1944).

En la lista publicada por la Biblioteca Nacional de España figura igualmente Hilario Andrés Torre Ruiz (1882, Munilla, La Rioja-1943, Valladolid), ciudad esta donde desarrolló su actividad profesional en la Universidad de la que llegó a ser rector, según recuerda Julio Fernández-Sanguino. Son ocho las obras catalogadas por la BNE sobre el autor que realizó su tesis sobre Federico Nietzsche en 1907. Como poeta mantuvo una gran actividad en la vida académica y cultural vallisoletana, y publicó 'Poemas' (1917), 'La poesía de Amado Nervo' (1924) y el estudio sobre helenismo y poesía en 'Dos ensayos' (1928), además de 'Cuestionario para examen de lógica fundamental' (1921).

«En la Biblioteca Nacional están todos los autores españoles desde que se empezaron a imprimir libros, tenemos millones de títulos y autores», explica Lola Rodríguez Fuentes, directora del Departamento de Referencia de dicha institución. ¿Gozan los escritores que pasan a dominio público de mayor difusión una vez liberados sus derechos? «Hay años en que eso sucede con figuras importantísimas como Miguel Hernández el año pasado; como Biblioteca Nacional tenemos que dar difusión a todo tipo de autores, sobre todo a los menos conocidos, en algunos de cuyos casos su obra pasa a ser más divulgada».

De los seis autores de Castilla y León subraya Lola Rodríguez Fuentes que sus obras tienen mucha relación con «lo local, con costumbres y aspectos etnográficos. Hay editoriales que aprovechan que su obra queda libre para hacer antologías de poesías, relatos, estudios, artículos, etc. De lo que se trata es de que esos contenidos se puedan volver a editar sin tener que solicitar autorización, y lo mismo sucede si se quiere hacer una adaptación para una serie o una película».

Desde la Ley de Depósito Legal de 1958, de todo lo que se publica en España tienen que ingresar dos ejemplares en la Biblioteca Nacional. «Anteriormente había otras legislaciones que exigían a los impresores que todo lo que se imprimía viniese a nuestros archivos, pero no era un proceder tan exhaustivo como desde 1958; a mayores, la Biblioteca Nacional se encarga de comprar todo aquello que salga al mercado y recibimos muchas donaciones; son muy poquitas cosas las que se nos pueden quedar fuera de catálogo».