Cultura
Alejandro Fierro: «Es mentira que el cine del pasado fue mejor que el actual»Cultura
Alejandro Fierro: «Es mentira que el cine del pasado fue mejor que el actual»Guarda en la memoria imágenes y sensaciones que le dejaron 'El enemigo público' (1931), 'Casablanca' (1942), 'Ben Hur' (1959), 'El planeta de los simios' (1968) o 'Asignatura pendiente' (1977). En torno a películas como estas decidió Alejandro Fierro (Santa Cruz de Tenerife, 1968) trazar una ... particular geografía cinéfila en la que da cabida a 63 «grandes películas» rodadas entre los años treinta y ochenta del pasado siglo. De todo ello habla en 'Qué grande era el cine' (editorial MenteKupa) este canario de pasado vallisoletano, afincado en la actualidad en Venezuela. Desde los años noventa trabajó como periodista en varios medios a orillas del Pisuerga y en la Seminci hasta que en 2012 puso rumbo a Latinoamérica asentándose finalmente en Caracas, donde reside trabajando para el Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica, «una entidad de asesoría electoral y políticas públicas para movimientos sociales latinoamericanos», explica desde la librería Sandoval de Valladolid (plaza del Salvador) donde este martes presentó el libro.
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De sus colaboraciones cinéfilas con la revista 'MenteKupa' ha surgido el libro, planteado como un viaje por lo mejor que, a su criterio, ha dado la gran pantalla. «Empecé a escribir aquellos artículos teniendo la impresión de que en estos tiempos de plataformas digitales, donde la elección del usuario es absolutamente libre, casi nadie se decanta por el cine clásico; de hecho ahora una película hecha en 2015 parece vieja», expone sin perder de vista que, cuando disfrutó por primera vez de 'Casablanca', habían pasado cuarenta años desde su estreno. Así se lanzó a recopilar memoria en torno a grandes películas de la historia. «Lo he hecho con 63 títulos en los que mezclo crítica y comentarios personales, aspectos de mi memoria cinematográfica y sentimental de lo que esas cintas han representado para mí».
Lo que también ha pretendido Fierro mas allá de hacer parada en obras legendarias como 'La ley del silencio' (1954), de Elia Kazan o 'Lawrence de Arabia' (1962), de David Lean, es redescubrir «pequeñas joyas» de calidad pero ausentes del imaginario colectivo. Es el caso, apunta, de 'Dejad paso al mañana' (1937), de Leo McCarey, o 'Asignatura pendiente', de José Luis Garci (1977). En el catálogo de esa memoria sentimental hay títulos finalmente desechados que, admite, no han resistido bien el paso del tiempo. Se declara «arrepentido desde el minuto uno» del título del libro –'Qué grande era el cine'– por dar a entender que cualquier tiempo pasado fue cinematográficamente superior al actual. «Aquel era el nombre de la sección de la revista, aunque como responsable de elegir el título del libro intelectualmente no esté muy de acuerdo con él. Es mentira que el cine del pasado fue de mayor calidad que el de ahora. El cine era, es y será grande cuando alcance la grandeza», cuenta quien asegura seguir viendo «muchas cintas antiguas, tanto buenas como malas. Y si nos remontamos a la época del cine mudo, sucede igual».
Una película buena, entiende Fierro, es aquella que consigue transmitir «una emoción artística; un filme es bueno cuando te toca; puede ser la emoción del amor, la tristeza, el humor... Y malas son aquellas películas incapaces de llegarte, si no notas que te remueve algo, eso es que ha fallado. Martin Scorsese decía que quien se precie de que le gusta el cine debería ser capaz de valorar los hallazgos de una película, aunque esta no le guste especialmente».
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