Entre Hitler, el Papa y Churchill

En Cabanillas del Campo, el pueblo donde más libros se compran por Internet, triunfa 'Tu luz en la oscuridad', de Meg Ferrero, una experta en novela romántica.

Ni 'De la finitud', el poemario con el que acaba de despedirse Günter Grass, ni el 'Lobo estepario', del mismísimo Hermann Hesse; lo que los alemanes buscan hoy en las librerías es la edición crítica de 'Mein Kamp' ('Mi lucha'). La obra de Aldolf Hitler lleva noventa días encabezando las listas de los libros más vendidos, y eso que la nueva versión del ideario del dictador tiene 1.948 páginas y cuesta 59 euros. Antes de que llegara a las tiendas la tesis ideológica del padre del Holocausto, los libreros alemanes acumulaban nada menos que 15.000. Muchos, pero no tanto como los 70.000 que cada año se venden en la India -el lugar donde más se lee del mundo a pesar de sus altísimas tasas de analfabetismo-, en donde ese libro nunca ha dejado de ser un superventas.

Los alemanes, en cualquier caso, reparten esta semana sus preferencias entre 'Mi lLucha' y 'El matón que soñaba con un lugar en el paraíso', de Jonas Jonasson, que después de entrar por la puerta grande en el Olimpo de los escritores de éxito con 'El abuelo que saltó por la ventana y se largó', cuenta ahora la rocambolesca historia de un asesino.

Pero ¿qué lee el resto del mundo? En España las cosas van por otros derroteros y estos días andamos locos con 'Olvidé decirte te quiero', el último trabajo de Mónica Carrillo. La encargada de presentar el informativo 'Noticias Fin de Semana' en Antena 3 se ha convertido en la reina de las ventas con la historia de Malena, una chica que después de sufrir un accidente de coche que casi le cuesta la vida, hace un repaso a lo que ha sido su existencia y a todo lo que, de haber muerto ese día, le habría quedado pendiente de decir.

Detrás, las 'Cinco esquinas', del rejuvenecido Vargas Llosa, y la 'Historia de un canalla', de Julia Navarro, encabezan las listas en un país en el que, según las últimas encuestas del Gremio de Editores, los índices de lectura se han recuperado casi cinco puntos y ha pasado de estar a la cola de Europa a situarse, más o menos, en la media.

Los más lectores

Es probable que algo haya contribuido a dar ese empujón Cabanillas del Campo, el pueblo de Guadalajara que, proporcionalmente, más libros compra por Internet de toda España. Según datos facilitados por Amazon.com, en este municipio de poco más de 9.000 habitantes el 54% son clientes de esa compañía de comercio electrónico, que el año pasado entregó una media de 90 libros semanales a sus vecinos.

En esa suerte de paraíso terrenal de la lectura creen que la explicación está en que es un pueblo muy joven -la media tiene entre 35 y 40- y el número de librerías es muy bajo. Luis Blanco, concejal de Servicios Sociales e Igualdad, es uno de esos muchos clientes de Amazon en el municipio. «Hace poco he comprado 'El pollito Pío' para un sobrino y lo último que pedí para mí fue 'Hotel Mediterráneo'», comenta, y apunta que el suyo es el municipio de Castilla-La Mancha con la renta per cápita más alta y que eso también ayuda.

En España, como en buena parte del resto del planeta, los primeros puestos del apartado dedicado a la no ficción están copados por los tratados de autoayuda; esos que llevan décadas ayudándonos a sobrevivir a un despido, un divorcio o, simplemente, a comer mejor. Esta semana, 'El libro de las pequeñas revoluciones', de Elsa Punset; 'Ser feliz en Alaska', de Rafael Santandreu, y 'Dulceida', de la reina de las blogueras de moda, Aida Domenech -cada vez que cuelga una foto en Instagram o un vídeo en Youtube recibe entre 600.000 y millón y medio de visitas-, se han hecho con el podio.

Churchill e historia del arte

Nada que ver, en cualquier caso, con los gustos de, por ejemplo, los rusos. La lista de los libros más comprados por los ex soviéticos en el apartado de no ficción la encabezan la biografía de Winston Churchill del historiador británico Martin Gilbert y la serie de libros de historia del arte 'El puente sobre el abismo' de Paola Vólkova. Sin duda, otra cosa.

En ese país, en el que su presidente, Vladimir Putin, felicitó el año enviando un libro de 400 páginas con sus textos proféticos a más de mil trabajadores públicos, también tienen tiempo para perderse en novelas de misterio, históricas y de aventuras. Esta semana, el libro de ficción más vendido es 'Planeta agua', del autor patrio Boris Akunin. A las andanzas Erast Fandorin le siguen 'Shantaram', del australiano Gregory David Roberts, ambientada en la India de los 80, y 'El marciano', del estadounidense Andy Weir, de cuya versión cinematográfica son responsables Ridley Scott y Matt Damon.

En Italia, tiran otras cosas. De hecho, la lista de los más vendidos en el apartado no ficción está encabezada por 'Vietato smettere di sognare', la historia del grupo de moda entre los adolescentes italiano, Benji & Fede, seguida por el último texto del Papa Francisco: su exhortación apostólica sobre la familia 'Amoris Laetitia'. Pero lo que llama de verdad la atención es el éxito -el número uno es para la última entrega de 'After', una serie de aventuras y sexo-, de la catalana Alicia Gimenez-Bartlett y sus 'Hombres desnudos', el premio Planeta 2015.

En opinión de Ramón Perelló, al frente desde hace ya unos años de Península, una de las divisiones de Editorial Planeta, aunque cada país mantenga sus peculiaridades, los gustos literarios del primer mundo suelen ir por los mismo derroteros. Perelló, que coloca sobre el sistema educativo, las familias y las editoriales, la responsabilidad de conseguir que España se convierta en un país más lector, cree que en el área de la no ficción una buena biografía, un libro de memorias, un análisis político en condiciones y los libros testimonio, son siempre bienvenidos. La prueba, dice, está en 'No tendréis mi odio', el libro escrito por el periodista Antoine Leiris después de perder a Helène, su mujer, en el atentado yihadista de la sala Bataclan en París.

«El viernes por la noche robasteis la vida de un ser de excepción, el amor de mi vida, la madre de mi hijo, pero no tendréis mi odio». Así comienza Leiris su relato; una suerte de expiación de la tristeza que sigue estando entre los libros más vendidos estos días en Francia, en donde los primeros puestos en el apartado de novela, según el semanario 'L'Express', son para 'La hija de Brooklyn', de Guillaume Musso y para 'Esperando a Bojanglés', la opera prima de Olivier Bourdeaut, un disléxico de 35 años que escribió su historia en solo siete semanas. Olivier se ha convertido en el fenómeno literario del año y tiene cautivados a los franceses.

Historias, en cualquier caso, que nada tienen que ver con las que les gustan a los lectores de Estados Unidos. Esta semana, los estadounideses hacen cola en las librerías por hacerse con la última entrega de la saga 'Crossfire', de Sylvia Day, la reina de las novelas románticas de alto voltaje que inicia su relato con algo como esto: «Enamorarme de él fue lo más sencillo que me ha pasado nunca. Sucedió al instante. Completamente. Irrevocablemente. Casarme con él fue un sueño hecho realidad». La segunda ha nacido para alegrar al batallón de fans de 'La Hermandad de la Daga Negra', se titula 'El mejor', está firmado por J. R. Ward y cuenta la historia de Rhage, «el luchador más letal y voraz de toda La Hermandad, cuya bestia interior nunca podía ser domada».

Los británicos, por su parte, han encumbrado a Kate Atkinson y su 'Un dios en ruinas' hasta lo más alto esta semana. Otra cosa es la no ficción, donde los libros de cocina andan haciendo furor. Especialmente si, además, nos ayudan a adelgazar. El tratado de Joe Wicks está en lo más alto de la lista; detrás, la 'Cocina infalible' de Mary Berry.