Los libros recomendados del escritor y pianista Diego Fernández Magdaleno

La lectura es una manera de ensanchar la vida y comprender el mundo. Es la afirmación del pianista y escritor de Medina de Rioseco Diego Fernández Magdaleno, al recomendar tres libros de la literatura contemporánea, el primero de aforismos, el segundo de poesía y el tercero de tinte autobiográfico.

'Insomnios' (La Isla de Siltolá, 2017), de Victoria León, una escritora y traductora nacida en Sevilla en 1981, «es un libro con esa luz única que proyectan unidas la inteligencia y la sensibilidad», según señaló el escritor riosecano, quien recordó que en este momento hay un auge de los aforistas en España y que la editorial La Isla de Siltolá tiene una colección importante de libros dedicados a este género.

La escritora italiana Antonia Pozzi, nacida en 1912, murió muy joven y comenzó a ser más conocida tras el apoyo y la admiración de Eugenio Montale. 'El alma desnuda' (Impronta, 2015) «es una antología de la escritora que nos llega gracias a una conexión muy especial que con estos poemas, de una belleza sobrecogedora, ha tenido la escritora Herme G. Donis, y nos da una visión muy profunda de la poesía de Pozzi».

En 'Mi patria era una semilla de manzana' (Siruela, 2016), de Herta Müller, «sentimos la oscuridad terrible de la Rumanía de Ceaușescu, en la que ella vivió y que fue forjando su personalidad, llenándose de esa tiniebla, de esa espesura, de esa sinceridad verdaderamente impresionante que impregna y humedece cada página de esta escritora irrepetible».

El pianista Premio Nacional de Música y escritor amplía la frase de Umberto Eco de que «la lectura nos hace tener una vida más larga hacia atrás», expresando que leer «nos regala un pasado que desborda cualquier límite y nos permite alcanzar un conocimiento a través de ese diálogo, como se ha dicho tantas veces, con los desconocidos y los muertos». Porque «los muertos nos hablan a través de los libros y reviven en nosotros cuando los leemos».

Fernández Magdaleno, en su faceta de escritor, es autor de El tiempo incinerado (2005), Libro del miedo (2006), Razón y desencanto (2008) y El rigor de los signos. Notas para Pedro Aizpurua, 2019-2020 (2022), entre otros. En una casa que es una biblioteca o una biblioteca en la que hay una casa, asegura que para él «no hay frontera entre la vida y la lectura, ya que ambas se fecundan mutuamente». Es una necesidad porque «es imposible comprender algo si se ignora lo que se ha escrito sobre ello a lo largo del tiempo». Por eso afirma que «pensar la vida es, en buena medida, ir a la palabra, a las páginas de los libros». Y junto a la lectura, el amor por los libros, con sus tipografías, el tipo de papel, el tacto, el diseño de cada página, por lo que recuerda la frase de Juan Ramón Jiménez que expresa que «en edición diferente los libros dicen cosa distinta».

Fernández Magdaleno reconoce que el hecho de conocer a algunos escritores siendo adolescente le ha influido mucho. En este sentido recuerda sus encuentros con Miguel Delibes, gracias a Miguel Frechilla y a Félix Antonio González. «Leer y escuchar a Delibes, compartir un paisaje que es simultáneamente físico y espiritual, ha sido una experiencia inolvidable».

El escritor riosecano afirma que los niños «no deben percibir la lectura como un sustituto de formatos audiovisuales, porque lo que la lectura les aporta no pueden encontrarlo en otra parte. Es un mundo único. Y cuando comiencen a caminar por él ya no podrán abandonarlo».

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