Las editoriales calientan motores

Comenzando por el actual género rey de la ficción. Benjamin Black, la versión 'noir' de John Banville, entrega 'Los lobos de Praga' (Alfaguara), novela negra histórica. Por su parte, Eugenio Fuertes cuenta un nuevo caso de su detective Ricardo Cupido que se traslada a Toledo en 'Piedras negras' (Tusquets).

No es novela negra, pero sí bebe de su indagación psicológica la última novela de Jonathan Lethem 'Anatomía de un jugador' (Ramdom House Mondadori). El narrador estadounidense reflexiona sobre el azar y la identidad a través de un jugador de backgammon que cree haber perdido sus dones telepáticos a causa de un tumor. La partida determinante transcurre en Berlín.

El misterio acompaña a los personajes de Haruki Murakami que, tras la primera entrega del primer libro de 'La muerte del comendador' (Tusquets), en breve ofrecerá el 'Libro segundo'. El título hace referencia a un cuadro y el protagonista es un pintor retirado en una casa de montaña. Ha comenzado el retrato de un adolescente y este desaparece. Otro clásico de cada temporada es el indómito y lúcido Michel Houellebecq que vuelve con 'Serotonina' (Anagrama). Florent-Claude Labrouste, el protagonista, tiene 46 años, detesta su nombre y se medica con Captorix, un antidepresivo que libera serotonina. Su periplo arranca en Almería, con un encuentro en una gasolinera con dos chicas, sigue por las calles de París y después por Normandía, donde los agricultores están en pie de guerra. Francia, la Unión Europea y la vida sin rumbo del francés se hunden.

Lumen publica el nuevo fenómeno literario que llega desde Islandia, 'Para Elga', de Bergsveinn Birgisson. Es una novela romántica, conmovedora también por la avanzada edad de su protagonista, Bjarni. Llega refrendada por el Premio de los Libreros de Islandia, el Premio de los Lectores de Nantes y el Premio Amphi. Y amor extraño y prohibido es el que narra Jamie Quatro en su primera novela 'El sermón de fuego' (Libros del Asteroide). Esta misma editorial recupera un clásico hiperrealista y tremendo, 'Claus y Lucas', de Agotha Kristoff, la novelista húngara-suiza.

Más cercano es el universo que Juan Vico plantea en 'El animal más triste' (Seix Barral). Un grupo de amigos se reúne en una casa de los Pirineos donde desempolvan viejos fantasmas; entre ellos, un cortometraje experimental que rodaron en sus años universitarios.

Jorge Edwards recrea los amores difíciles de un joven Pablo Neruda en Birmania en 'Oh maligna' (Reino de Cordelia) y la cubana Wendy Guerra sigue novelando la resistencia de sus compatriotas ante el régimen comunista en 'El mercenario que coleccionaba obras de arte' (Alfaguara). Ray Loriga también vuelve con 'Sábado, domingo', en la misma editorial de Prisa, así como David Foenkinos, que conquistó al público con 'Charlotte' y publica ahora 'Hacia la belleza'. Los cuentos del uruguayo Felisberto Hernández han sido reunidos por Alfaguara y prologados por Loriga, y los del colombiano Evelio Rosero por Tusquets.

Primo Levi y Torrente Ballester son clásicos revividos por Península el primero –'Yo, quien os habla'– y por Alfaguara el segundo con la publicación de 'Los gozos y las sombras'. Para los que gustan de la aventura leída 'Tras los pasos de Livingstone' (Península), de Xavier Moret, un recorrido por Tanzania, Uganda, Kenia y Congo siguiendo las huellas de los primeros europeos. Ese mismo sello publica 'Un manifiesto por la vida', de Denis Mukwege la autobiografía de este médico congoleño cuya lucha por proteger a la víctimas de las violaciones de guerra ha sido reconocida con el Nobel de la Paz 2018. Diego Carcedo recuerda sus tiempos de reportero en 'Sobrevivir al miedo' y Paca Trico demuestra que «la indignación no se jubila nunca» en 'La rebelión de los mayores', también en Península. Y el economista vallisoletano Luis Garicano reflexiona sobre 'El contraataque liberal' en un ensayo subtitulado 'Entre el vértigo tecnológico y el caos populista', para la misma editorial.