El cineasta salmantino Pablo Moreno ultima el traslado de su productora a un nuevo estudio y plató de cine instalado en las inmediaciones de Ciudad Rodrigo, en la pequeña localidad de Ivanrey. Su previsión es que la obra esté completamente terminada antes de que finalice ... el mes de octubre.
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En una parcela de cuatro hectáreas de extensión (40.000 metros), que llevará por nombre 'Rodriwood', la productora cinematográfica de Pablo Moreno ha instalado un edificio de oficinas y ha trasladado decorados móviles para rodajes. Situado a sólo dos kilómetros de Ciudad Rodrigo, «está lo suficientemente lejos de fuentes sonoras como para rodar de manera tranquila, sin estar aislados», explica.
Pese a su modestia, el nuevo estudio despuntará en una comunidad autónoma en la que no abundan este tipo de instalaciones. Pese a la creciente proliferación de rodajes, Castilla y León es requerida más bien por la riqueza de sus parajes naturales y de sus escenarios urbanos que por sus instalaciones cinematográficas.
Moreno no sabe cuántos estudios de este tipo puede haber en la comunidad, en el caso de que haya otros. «Debido a las limitaciones impuestas por el Covid no hemos tenido ocasión hasta ahora de hacer el correspondiente estudio de mercado», explica. Y es que, aunque el nuevo estudio está pensado para dar servicio, en primer lugar, a su propia actividad cinematográfica, se ofrecerá también a otras empresas interesadas.
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«Tenemos 1.000 metros cuadrados de decorados exteriores, que es el valor principal del estudio». Se trata de decorados móviles y desmontables, que pueden adaptarse a las distintas necesidades narrativas de historias diferentes.
«Queremos atraer a pequeñas y medianas producciones ajenas que necesitan infraestructura a un precio razonable». Entre los servicios que ofrecerán a sus futuros clientes está un importante fondo de armario de vestuario histórico, fruto de los sucesivos rodajes, que suma varios cientos de piezas «y que queremos poner en valor».
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Moreno tiene una trayectoria de más de una década de ejercicio profesional, durante la que ha filmado una decena de largometrajes. Su campo de trabajo fundamental son las biografías de santos, o personas destacadas de la Iglesia católica, con vidas intensas y de marcado compromiso social hacia los pobres, los débiles o los marginados. Películas de acabado ambicioso, aunque presupuesto modesto, como 'Poveda', 'Luz de Soledad' o 'Red de libertad' le han granjeado el aprecio del público, así como numerosos galardones internacionales.
Su próximo estreno previsto es 'Claret', dedicada al fundador de los claretianos, el 24 de septiembre. Pero tiene otros dos largometrajes pendientes del salto a las salas de cine: uno dedicado a la figura de la beata Petra de San José, fundadora de las 'Madres de los desamparados', y otro, a la santa Vicenta María López Vicuña, promotora de las religiosas de María Inmaculada. Ambos tendrán que esperar al próximo año.
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Hasta ahora, la productora de Moreno, que se denominaba 'Contracorriente' estaba instalada en el núcleo urbano mirobrigense, en la calle Domínguez Bordona. Allí contaba con taller de confección de vestuario, instalaciones y platós interiores, pero de unas dimensiones mucho más limitadas. Una vez que se complete el traslado a las nuevas instalaciones cambiará el nombre de la empresa a 'Stellarum films'.
Desde el principio, hasta la actualidad, Moreno ha desarrollado toda su carrera cinematográfica desde su Ciudad Rodrigo natal. «Nosotros nos creemos esa idea de que las industrias culturales son motores de empleo y por eso hemos decidido quedarnos aquí, en nuestra tierra, para intentar ayudar», explica el realizador salmantino. «Si queremos cambiar el mundo hay que empezar por nuestra casa, que tiene muchas necesidades». A modo de ejemplo, el realizador recuerda que cuando su mujer estaba embarazada tuvieron que recorrer 100 kilómetros para llevarla al hospital donde pudiera dar a luz.
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Pero, además, Pablo Moreno afronta este mes de noviembre la décima edición del Festival de Cine Educativo y Espiritual que puso en marcha en Ciudad Rodrigo con notable éxito. Y colaborará con 'First Team', la fundación de la actriz Assumpta Serna, con la que intimó durante el rodaje de 'Red de libertad', en la que interpretaba a la monja protagonista, y que vuelve a colaborar con Moreno en 'Claret' en un papel secundario.
«Con su fundación 'First Team', Assumpta Serna y su marido quieren incorporar el debate ético y de conciencia a la formación de los futuros profesionales del cine y es un proyecto que nos gusta mucho y que apoyamos», explica Pablo Moreno. «Si queremos un audiovisual de calidad, respetuoso y constructivo hay que formar a los profesionales también en las cuestiones éticas relacionadas con los distintos modos de narración».
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«La vida del santo es un viaje del héroe»
Podríamos decir que Pablo Moreno hace películas de santos, si no fuera porque tal expresión desparramaría toneladas de ideas preconcebidas y prejuicios sobre sus historias que llevarían a una visión completamente distorsionada de su trabajo. Y es que, desde el principio tuvo claro que no quería hacer películas de cartón piedra sobre seres envarados y artificialmente perfectos, sino contar historias de seres humanos excepcionales, pero vulnerablemente humanos, como los propios espectadores. Seres de carne y hueso pero que fueron capaces de levantar una obra social y cívica importante sin dejar de ser figuras de la máxima relevancia dentro de la Iglesia Católica.
«Nosotros no adoctrinamos, ni pontificamos, porque eso no lleva a ninguna parte. Lo que sí hacemos es reivindicar nuestro derecho a existir y a contar historias relevantes de las grandes figuras de la Iglesia; personas que merecen la pena cuyo interés no se agota en su dimensión religiosa», explica Moreno.
«Nos dirigimos a todo tipo de públicos: a creyentes y no creyentes. Y aspiramos a ser un puente de entendimiento. No buscamos la confrontación ni la provocación», asegura el realizador salmantino.
Que las películas estén financiadas por las órdenes religiosas relacionadas con sus protagonistas no es un hándicap para la credibilidad de los relatos a juicio de Pablo Moreno. «Han desarrollado un sentido crítico de su propia historia, que incluye también la autocrítica. Y tienen claro que no tiene sentido hacer películas de estampitas, porque no se las cree nadie. Yo busco narraciones emocionantes, estimulantes y honestas».
A fin de cuentas, el cineasta salmantino reivindica que las vidas de los santos y las de los héroes no están tan alejadas como pudiera parecer a simple vista. «En toda vida de santos del siglo XIX, campo en el que nos estamos haciendo expertos, hay unos parámetros comunes: son historias que se acercan al viaje del héroe: hay una llamada que se acepta, un sabio que los acompaña y ayuda en el camino, un viaje tormentoso con su noche oscura y todos alcanzan al final el premio, el vellocino de oro, el objetivo que se habían planteado y que justifica su vida».
'Claret' y otros dos estrenos pendientes
Moreno estrena el día 24 de septiembre 'Claret' que aborda la vida del fundador de los claretianos, y lo hace a partir de una trama, basada en una historia real, que involucra al escritor Azorín. El novelista y ensayista descubrió que la obra y la biografía del religioso había sido gravemente manipulada por sus enemigos y decidió iniciar su propia investigación y, a raíz de ella, ayudar a limpiar su nombre. En 'Claret' esa investigación detectivesca de Azorín es la estructura que permite abordar algunos episodios esenciales de su trayectoria, como su relación con la reina, de la que era confesor y asesor, o su decidido compromiso contra la segregación racial y la esclavitud en Cuba.
La segunda película pendiente gira en torno a la figura de la beata Petra de San José, la malagueña que fundó la congregación de las «Madres de los desamparados». «Desarrollan una labor social enorme con asilos, centros de acogida para menores y para chicos con situaciones especiales». Moreno articula su historia de nuevo en torno a una anécdota real: el robo de los huesos de la beata en el Santuario de San José de la Montaña (Barcelona) donde se guardaban le sirve de excusa para idear una trama a partir de la cual se va retratando al personaje.
La última y más reciente película -la ha terminado en junio- es 'La sirvienta', que gira en torno a la figura de Santa Vicenta María López Vicuña, fundadora de las Religiosas de María Inmaculada. «Es una de esas órdenes pioneras en trabajar a favor de la mujer, facilitándoles educación y protección», explica Moreno. A mediados del siglo XIX, con el primer gran éxodo de población rural a las capitales, muchas mujeres se desplazaron para trabajar como empleadas de hogar, pero no pocas caían en engaños y en redes de prostitución. «Lo que hacía esta congregación era acoger a estas chicas, formarlas, y orientarlas hacia trabajos en familias honradas que ellas tenían recogidas en una bolsa de trabajo. Ahora sigue haciendo básicamente lo mismo, pero trabajan con mujeres llegadas desde los países del Este, a veces con una formación profesional altísima».
«La sirvienta' cuenta la historia de esta mujer, «que es una fabulosa historia de transformación, pues ella, que procede de la alta sociedad, se convierte en la sirvienta de las sirvientas».
Estas dos últimas películas espera estrenarlas en el primer semestre del año 2022: la primera en los primeros meses, y la segunda allá por junio.
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