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Corría sus riesgos Luis de Mercado, médico de cámara de Felipe II, al sugerirle la necesidad de extraerle una pieza de su dentadura. En manos de Trinidad Arroyo, primera licenciada en Medicina por la Universidad de Valladolid, estuvieron los ojos de ... Benito Pérez Galdós y ella fue quién salvó la vista en 1912 de quien aún dio algunos títulos al teatro. Pío del Río Hortega no tuvo la relación fluida con su colega Ramón y Cajal que cabía esperar entre dos histólogos en el erial nacional. Son tres de los científicos vallisoletanos que tienen vitrina en la nueva exposición del Museo de la Ciencia, 'Plastihistoria de la ciencia. Y mientras en Valladolid...'.
A lo largo de 33 escenas de plastilina se recorren una veintena de hitos científicos de la humanidad intercalando ocho momentos históricos importantes de Valladolid y cinco personajes destacados de conocimiento relacionados con la provincia. La muestra es fruto de la colaboración entre Museo, la Fundación Educa y la colaboración del matemático Mariano Esteban Piñeiro quien ha revisado la información de los científicos locales.
A los tres citados hay que sumar a Rodrigo Zamora (1542-1620) que ejerció los tres cargos científicos del momento, otorgados por Felipe II quien contravino su propia ley de acumulación de cargos. Cosmógrafo y matemático, creo en Sevilla un jardín botánico con plantas traídas del Pacífico. Y José de Acosta, antropólogo y naturalista, que registró datos hidrográficos de América, vivió en el lago Titicaca y avistó un cometa en 1577.
La palentina Trinidad Arroyo fue una destacada oftalmóloga que también lucho por los derechos civiles de las mujeres y murió en el exilio en México. En Buenos Aires falleció Pío del Río Hortega, candidato en tres ocasiones al Nobel (1924, 1929 y 1937).
El viaje por la historia de la ciencia que propone el Museo comienza con el descubrimiento de los metales, sigue con Pitágoras, el matemático que buscó la armonía universal, Arquímedes y su baño para describir el principio de la hidrostática y la pólvora china, aquella con la que llenar el cielo de fuegos artificiales antes de descubrir su poder mortífero. En España el Studium Generale de Palencia pone los cimientos de la vida universitaria. Por aquel entonces, en 1255 Alfonso X el Sabio otorga a Valladolid el fuero que la convierte en ciudad.
La imprenta de Gutenberg es coetánea del casamiento de Isabel y Fernando, los Reyes Católicos en 1496, también por estos lares. Por entonces también el Cardenal Mendoza manda construir el Colegio de Santa Cruz mientras el hombre renacentista por antonomasia, Leonardo, lo mismo ingeniaba un mecano volador que pintaba la 'Virgen de la Roca'. Colón muere en Valladolid en 1506, sin que tuviera demasiada repercusión. La casa del almirante sigue abierta hoy.
Galileo descubría los satélites galineanos y Felipe III establecía la capital en la ciudad del Pisuerga. Newton, Franklin, Watt o Morse abren nuevos campo en la física, la electricidad, la industria o las comunicaciones. Darwin, Mendeleyev, Perla o Curie dan pasos hacia un mundo en el que el ferrocarril revoluciona el transporte y trae a Isabel II en tres ocasiones a Valladolid. Los trabajos sobre el ADN, luego celebrados con un Nobel, son dados a conocer en 1953, el mismo año en que Fasa Renault se establece en la ciudad, determinando su economía.
El Museo de la Ciencia reabre con otras dos exposiciones temporales, 'Dicen que tienes veneno' y 'Vacunando. ¡Dos siglos ysumando!', la permanente y el planetario.
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