César Bona: «Tal vez la solución al fracaso escolar esté en escuchar más a los alumnos»

Los contenidos en la docencia son importantes, pero para que tengan sentido deben estar relacionados entre ellos y tener conexión con la vida de los alumnos y alumnas, según el docente finalista en los Global Teachers Prize de 2015, César Bona. Asimismo, defiende la importancia de la educación integral y la necesidad de escuchar más a los alumnos para combatir el fracaso escolar, que en España ronda el 25%.

«Hay personas que piensan que quitar contenidos es bajar el nivel, pero el sistema educativo está demasiado centrado en esos contenidos y sufre una temporalización y una presión que ahogan», aseguró durante su participación en el Aula de Cultura de El Norte de Castilla, patrocinada por la Fundación Vocento y Obra Social La Caixa.

Por otra parte, explicó que uno de los retos es fomentar el pensamiento crítico en los menores. «No queremos que se dejen llevar por la primera opinión que saquen de un titular o de las redes sociales, queremos que contrasten y sean críticos». No obstante, con el sistema actual, reconoció que «es muy difícil encontrar el espacio para escuchar a los alumnos e invitarlos a reflexionar y a expresarse».

A su juicio, una de las carencias es que no se tiene en cuenta el fin último de las materias que se enseñan y cree que una pregunta que tendrían que hacerse todos los implicados es ¿para qué sirve lo que se estudia? En este sentido, invitó los educadores a «niñizarse», es decir, a ponerse en el lugar de los estudiantes porque «al igual que a cualquier adulto les gusta sentirse escuchados, queridos y útiles».

En su último libro 'Humanizar la educación' (2021) también hace referencia a los retos y trasformaciones pendientes. Entre ellas, llevar a las aulas temas como la salud o la nutrición. En este sentido, hizo referencia a estudios que determinan que más del 60% de los hombres tienen sobrepeso y el 40% de las mujeres, además, 3 de cada 4 niños con obesidad la padecerán de adultos. Por eso, ve paradójico que «aunque es uno de los grandes problemas del ser humano en los colegios tan solo se enseña la pirámide de los alimentos y no nociones sobre nutrición». Al igual que ocurre con la salud, ya que «estudiamos durante años el cuerpo humano, pero no sabemos hacer una RCP o cómo actuar ante una reacción alérgica», lamentó.

Además, ve un error que conocimientos de desarrollo personal como la resiliencia, se queden fuera de los centros de enseñanza porque los considera incluso más importantes, ya que «sin resiliencia uno se hunde». Por último, reclamó una mayor presencia de los temas educativos en el debate político y recordó que «la educación necesita de buena política, pero la política también necesita educación».

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