El Museo de Escultura guarda 47 piezas incautadas durante la Guerra Civil

Las colecciones de los nueve museos estatales guardan pinturas, esculturas, joyas, vajillas, bienes arqueológicos, artículos textiles, mobiliario y diversos objetos artísticos procedentes de incautaciones durante la Guerra Civil y la posguerra que no han sido devueltos a sus propietarios. La Dirección General de Patrimonio Cultural y Bellas Artes ha realizado una auditoría a partir de documentos y bienes culturales cuyo origen ha sido documentado como «procedente de las incautaciones realizadas por la República para salvaguardar temporalmente los bienes de interés artístico y que nunca fueron devueltos a sus dueños por la dictadura franquista al acabar la contienda». En total, se han catalogado 5.126 piezas que custodian los museos del Estado.

El Museo Nacional de Artes Decorativas, el Museo Nacional del Romanticismo, el Museo Arqueológico Nacional, el Museo de América, el Museo del Traje, el Museo Nacional de Antropología, el Museo Sorolla, el Museo Nacional de Cerámica y el Museo Nacional de Escultura son las instituciones donde se hallan depositadas estas obras. En la colección del vallisoletano Colegio de San Gregorio, sede del Museo Nacional de Escultura, permanecen guardadas 47 piezas procedentes de incautaciones. Entre ellas figuran obras de estatuaria religiosa con figuras de la Virgen, San Francisco de Asís, Cristo Crucificado, Santo Tomás de Aquino, San José con el Niño, San Juan Evangelista y diversos ornamentos litúrgicos. La mayoría de estos bienes son de autoría anónima y su datación abarca desde el siglo XV hasta el XVIII y en algunos casos no se establece la fecha de datación.

Desde el Ministerio de Cultura se señala que se está procediendo a la catalogación de los fondos identificados, así como a la digitalización de los documentos relacionados con los procesos de incautación con el fin de facilitar su acceso a través de plataformas digitales. «Los trabajos iniciados vienen a dar cumplimiento a lo establecido por la Ley de Memoria Democrática», se apunta en un comunicado.

Aquí, el listado completo de las 47 piezas que se encuentran en el Museo Nacional de Escultura:

Desde el Ministerio se señala que «en muy pocas ocasiones» la documentación existente ha permitido identificar la procedencia de los bienes. La recopilación de la normativa relacionada con la incautación está organizada conforme a tres grandes bloques: normativa del gobierno de la Segunda República durante la Guerra Civil, normativa del régimen establecido por las tropas sublevadas durante la Guerra Civil y normativa del gobierno de la dictadura franquista.

En su nota de prensa el Ministerio traza el recorrido histórico que siguieron las obras incautadas: «Durante los primeros días de la sublevación militar, el gobierno de la República creó la Junta del Tesoro Artístico (JTA), una institución dedicada a proteger de los saqueos y bombardeos los bienes culturales y almacenarlos en depósitos seguros. A medida que las tropas sublevadas fueron ocupando territorios, crearon el Servicio de Defensa del Patrimonio Artístico Nacional (SDPAN) que, al finalizar la guerra, se debía encargar de la devolución de las obras a sus propietarios. Aquellos bienes que no fueron devueltos acabaron depositados en distintas instituciones y museos».

Una vez elaborado el inventario de bienes, el Ministerio señala que su «voluntad» es «la de retornar a sus legítimos dueños todos aquellos bienes que puedan ser identificados. Así, aquellas personas que localicen un bien de su titularidad pueden presentar su solicitud en el registro del Ministerio, y las solicitudes se estudiarán caso por caso».

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