El Museo de Escultura abre nuevos caminos en lo virtual

La directora del museo, María Bolaños, explica que la idea de la retrospectiva surgió tras un proceso de reflexión acerca de cómo lo virtual ganaba terreno a causa de la pandemia. «Hemos ido viendo que el mundo digital ha cobrado, para bien y para mal, una presencia enorme. Hemos dado un salto en los usos sociales que, en circunstancias normales, podría haber exigido una década», explica. «Esto tiene desventajas, porque se pierde el contacto físico con la obra, lo que supone una pérdida importante en el terreno de la experiencia y en la sensibilidad. Pero también es cierto que lo virtual te permite llegar a gente que está lejos, y que puede mantener así un vínculo con la cultura. Es una sustitución, pero tiene su eficacia y atractivo».

En ese proceso de discernimiento, el museo se planteó que la opción online podía brindar la posibilidad de recuperar proyectos del pasado «que tuvieron mucho eco, pero que fueron efímeros, como toda exposición es». De ahí surgió la idea de volver a reunir virtualmente las obras de una exposición como 'Tiempos de melancolía'. «Se trata de refrescar aquella experiencia, pero no tal cual fue, sino añadiendo una información que el visitante de entonces no conocía. Eso nos llevó a incluir el proceso creativo, de diseño y de montaje de la exposición, lo que nosotros denominamos 'la cocina', que raramente se ve, y que, sin embargo, es muy interesante para los profesionales, para los especialistas de museos, sin dejar de poder atraer también a otro tipo de espectadores no especializados pero curiosos».

La recuperación de 'Tiempo de melancolía' que ha realizado el Museo de Escultura de Valladolid va mucho más allá de los usos habituales en las páginas web. La muestra virtual se ha planteado de un modo novedoso desde el principio. Para empezar, por esa idea del reciclaje - tan del gusto del centro museístico vallisoletano, acostumbrado a sacar el máximo partido a sus recursos escasos. El equipo que dirige María Bolaños se ha dado cuenta de que en lo virtual es posible revivir un muerto, y no sólo eso, sino que es posible darle una vida diferente. Que es exactamente lo que el museo ha hecho con 'Tiempo de melancolía': crear un nuevo tipo de experiencia museística virtual que abre el campo a un sinfín de posibilidades. Por ejemplo, la de crear exposiciones específicamente pensadas para el universo inmaterial, con la absoluta libertad que se deriva de no tener que gestionar cesiones y seguros, como si ocurre, sin embargo, en el limitado universo físico. Es el camino que explorará el museo en el mes de marzo con una exposición virtual dedicada a un libro, 'Arte de épocas inciertas', de Luisa Caturla (ver apoyo) y concebida específicamente para lo virtual.

En 'Tiempos de melancolía', que ya está disponible en la web, nos encontramos con una experiencia envolvente, que en cierto modo recuerda a las 'ediciones especiales' de discos o películas, que incluyen el contenido original y lo rodean de complementos para enriquecer la percepción de la obra. Por un lado, tenemos un recordatorio convencional de lo que la exposición fue, con una serie de apartados gráficos, acompañados de textos explicativos. Pero a ello se añaden novedades imprevistas, como esa especie de 'making off' de la muestra, lo que Bolaños denomina 'la cocina', que nos descubre algunos secretos desconocidos de la trastienda de la exposición.

A todo ello se añaden los complementos. El principal de ellos, el catálogo original, que puede descargarse gratuitamente ahora. Pero también otro tipo de textos complementarios (poesías, artículos) y hasta un playlist, una lista de reproducción musical alusiva a la melancolía. Se suma el excelente video promocional de la exposición original, que ya tenía la virtud de ampliar el foco de la mirada, al incluir cuadros que no formaban parte de la muestra. Y remata la jugada una conferencia impartida en su momento por la directora del museo María Bolaños, en el contexto de un curso motivado por la exposición original. Todo ello hace que 'Tiempos de melancolía' logre construir un espacio novedoso para el vínculo con el arte en el mundo online.

Bolaños explica que el objetivo era crear una experiencia de inmersión que contara tanto el antes -la cocina- como el durante -la exposición propiamente dicha- y el después, esto es las actividades complementarias a las que dio origen. Conferencias, cursos, lecturas de poesías… «Y hemos añadido también como cierre un pequeño capítulo que enlaza aquella exposición, de 2015, con la experiencia actual de la Covid, con el fin de acercar el tema de la melancolía al momento presente». Por ese motivo, incluyeron también el enlace a una exposición de fotografías del Patio Herreriano sobre la ciudad vacía por el confinamiento que permitía extender la mirada 'melancólica' hasta la actualidad.

«Es una línea que hemos abierto y a la que queremos dar continuidad», explica María Bolaños. «Recuperaremos algunas otras exposiciones del pasado y crearemos otras nuevas. Nos gusta la idea de que los proyectos duren, que no se pierdan. La idea de reciclaje, o mejor, de sostenibilidad, lo define bien».