Los caminos infinitos de la cerámica, en Valladolid

Anduvo cerca de ese premio Rita Gonçalves cuyas 'Magonchas' (conchas) tuvieron que conformarse con la primera mención especial. «Es una obra muy trabajada. Parto de pequeñas bolas, una para cada esponja, las hay que vaciar y luego hacer el dibujo», explica la artista portuguesa que se ha inspirado en el mar. «Es un conjunto frágil y a la vez fuerte por su unidad», explica aludiendo a la forma y a su sentido. Carlos Pérez, de Cabañas de Aliste (Zamora)recibió la segunda mención por 'Menina'. Este ceramista logra que su barro se asemeje a la piedra. También portugués es Alberto Miranda, tercera mención especial por su colorido 'Ícaro'.

Desde Bélgica e Italia llegaron obras como 'El trío', de Vladica Sivcèc. A la vallisoletana Laura Castrillo la arcilla le permite levantar el puños en 'Disconformidad II'. Luis Rivero, desde Tordesillas, reflexiona sobre el 'Caminante' y Susana del Aire, que trabaja en Torrelodones, explora las formas redondeadas en sus 'Gotas de amor'. La holandesa Simone Immink, desde Segovia, muestra 'Diálogo de dirección única', una pieza sobre la dificultad de la comunicación en la que usa la técnica de churros.

De la tridimensionalidad escultórica a la bidimensionalidad del cuadro lleva Fernando Miguel Polo la cerámica en su obra 'Atrapando la luna azul'. Marta Ferrate Torra alterna la arcilla tratada como material volcánico en su dinámica 'Danza de Gea y Vesta' y como superficie pulida y sofisticada en 'Tierra, nido dorado'.

La vasca Claudia Lorenzo recuerda a su paisano Chillida en la idea de su obra 'Modelando el viento' mientras que Luis Herranz moldea un geométrico 'Tirabuzón'. La arcilla solidificada con calor también sirve para perpetuar los 'Desastres de la guerra', que propone Fernando Miguel Polo. Así hasta 24 artistas de los 48 que concursaron en esta edición, según explicó el presidente de la Asociación de Ceramistas de Valladolid (ACEVA), Juan Carlos Gimeno. De la alfarería tradicional a la cerámica contemporánea hay un techo amplio que cada año se refleja en la Feria de la Cerámica que se celebra en septiembre coincidiendo con las fiestas patronales y cuyos puestos son elegidos por ACEVA. «Intentamos mostrar la mayor cantidad posible de técnicas, estilos y procedencias, evitando que se repitan», aclaró Gimeno.

La exposición podrá verse hasta el 8 de septiembre. Después Joaquín Díaz mostrará el universo de los constructores de instrumentos en esa misma sala.