cristina martín
Sábado, 9 de mayo 2015, 16:39
La muralla de la villa del Caballero se mostró una vez más como el telón de fondo perfecto para acoger la octava edición de Circolmedo, entre un público deseoso de volver a disfrutar de cada número y del esfuerzo e ilusión que sobre el escenario marcaban durante la noche de ayer los seis artistas y grupos que hicieron vibrar la Corrala del Palacio del Caballero de Olmedo, en la primera jornada del festival, que contó con la presencia de cerca de un millar de personas entre los diferentes espectáculos.
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Una vez que las luces bajaron y el gran Cabaret de circo comenzó, el público se mostraba más animado e hipnotizado por cada uno de los números, que despertaron la ilusión y el buen humor entre pequeños y también mayores. Presentada por el mago Miguelillo, un maestro de ceremonias con un toque divertido, fueron pasando por el escenario olmedano los artistas de la noche, como los cinco integrantes de la compañía La Trupineta, que sorprendieron con un número de básculas y portés en grupo.
La divertida escena de los hula hoops de Sandra, de la compañía El Badulaque, dejó impresionados a los espectadores de la Corrala, al igual que el juego de telas de otro de los artistas, o el número de trapecio ofrecido por Zenaida, que dirigió las miradas del público hacia lo más alto. El actor y payaso Pepe Viyuela arrancó fuertes aplausos entre el público. Conocido por sus papeles televisión y cine, llegó a Circolmedo con uno de sus clásicos, donde el humor gestual atrapó las risas de los espectadores.
Los miembros de la compañía Greenchichon, que durante la mañana mostraron sus habilidades circenses ante los pequeños del colegio de Olmedo, salieron al escenario de la Corrala con dos propuestas, uno de mazas, y otro de mástil, haciendo disfrutar de divertidos sketches y payasadas sin fin para que el ritmo no cesase ni un solo segundo.
Espectáculo de carpa
En esta octava edición de Circolmedo, se ha instalado por primera vez una carpa de circo, con capacidad para 250 personas, y que fue inaugurada ayer por la compañía Circo Mediterráneo, encargados de montarla hace varios días en el escenario olmedano y de llenarla de carcajadas y sorpresas ayer durante su espectáculo, que se podrá ver de nuevo hoy a las 17:00 h. y a las 20:15 h., así como el domingo a las 17:00 horas.
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Un montaje recoge lo mejor de la tradición circense incorporando las características del circo contemporáneo, manteniendo la ilusión y los números divertidos. Armando demostró su flexibilidad, Alfonso la destreza con las bandejas y también fue acompañado por su perro Michael, cantante y obediente amigo fiel.
El equilibrio sobre la goma o encima de cajas y cilindros fueron otros de los números ofrecidos por Circo Mediterráneo, presentado por el gran Dimitri, ya conocido por el público olmedano después de la gala del pasado año.
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Hoy, durante la mañana, continuará la Escuela Circo para los más pequeños, quienes junto a sus padres podrán divertirse en los espectáculos de la tarde y la gran gala de circo de la noche, donde ocho artistas realizarán acrobacias y malabares de forma, aparentemente, fácil, pero al mismo tiempo arriesgadas.
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