Secciones
Servicios
Destacamos
Javier Aguiar
Miércoles, 25 de marzo 2015, 21:51
Siete años en Valladolid. Siete años en los que la feria internacional de ilustración Ilustratour había crecido, se había arraigado y había sembrado interés por la cultura del libro ilustrado, al margen de esa otra riqueza que las instituciones siempre ponderan y que se mide en los euros gastados en los establecimientos de la ciudad. A todo eso dijo adiós el pasado mes de febrero la empresa i con i, organizadora del encuentro que desde este año se celebrará en la Casa del Lector del Matadero de Madrid.
Sobre las consecuencias de esta pérdida y también sobre sus causas se elucubraba el pasado lunes en la presentación de Vilustrado, la propuesta con la que el Ayuntamiento quiere suplir el vacío con el que se ha encontrado una ciudad que, en palabras de su alcalde, quiere convertirse en referente internacional en el mundo de la ilustración.
Se habló entonces del posible malestar generado en la corporación por la celebración en Palencia, y con patrocinio de la Junta, de la primera edición de ÑAM, Festival Internacional de Cómic y Novela Gráfica, un encuentro cuya continuidad todavía no ha podido confirmarse. A este respecto la concejala de Cultura trataba ayer de zanjar el tema: «No hay ningún tipo de problema, lo que dijimos es que era una pena que no se coordinara con nosotros una actividad en la que tenemos mucha experiencia, como se hace en Segovia con el Titirimundi. Sobre todo por parte de la Junta, que siempre había tenido muy buenas palabras con Ilustratour».
La respuesta la tenía Sabela Mendoza, directora de proyectos de la agencia madrileña que desde 2008 ha llenado de ilustradores el Patio Herreriano, el LAVA y los ya mencionados establecimientos. «Se había convertido en algo muy grande, había adquirido unas dimensiones que nos hicieron replantearnos el modelo de sostenibilidad, repensarlo de cara a garantizar su futuro», explica esta gestora que considera Madrid como «la sede natural» de la feria, entre otras cosas porque allí hay «un mayor público objetivo potencial» y, aunque no lo mencione, porque i con i ha instalado su sede fija en el citado Matadero. «Los proyectos culturales necesitan de ciertos cambios para hacerse viables de cara al futuro», remarca.
Mendoza recuerda que Ilustratour es un proyecto independiente que cuenta «con muchísimos apoyos» y encuentra en el micromecenazgo más de veinte entidades en la última edición su medio de supervivencia. Para su próxima edición, la primera fuera de Valladolid, barajan un presupuesto superior a los 100.000 euros y hasta ahora casi el 60% del mismo se cubría con las matrículas de los inscritos.
Vinculación
Esta gestora asegura sentir «muchísima vinculación» con la ciudad que dejan en lo que llama «un fin de ciclo cordial y agradecido». Asimismo reconoce que no recibió por parte del Ayuntamiento ninguna propuesta para convencerles de quedarse en Valladolid, si bien reconoce que «no sé muy bien qué tipo de propuesta nos hubiera hecho cambiar de idea».
Para la concejala de Cultura, que insiste en que el nuevo formato, con 30.000 euros de presupuesto, es idéntico al anterior, al menos en una parte, no había más problema que el hecho de que ahora el evento se organiza por la ciudad y con gente de aquí. «De hecho añade el Ilustratour se diseñaba, se programaba y se hacía de forma conjunta entre ellos y nosotros».
Lo cierto es que desde este año el mes de julio será un poco más aburrido en Valladolid.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.