El Fetal celebra su mayoría de edad con teatro rural cargado de memoria

El Fetal cumple su mayoría de edad con toda la frescura que aporta la juventud plasmada en su programación. La XVIII edición del Festival de Teatro Alternativo de Urones de Castroponce, que tendrá lugar entre los días 10 y 30 de agosto, presentada ayer en el Palacio de Pimentel, sede de la Diputación Provincial de Valladolid, centrará sus espectáculos en «la importancia de la memoria», según explicó Álex Rodríguez, director del Fetal. Así, varios de los espectáculos programados se incluirán dentro de la modalidad de teatro documento y tratarán temas de actualidad y cuestiones históricas con las que el espectador pueda reflexionar.

El presidente de la Diputación de Valladolid, Jesús Julio Carnero, recalcó que el Fetal es «un evento arraigado en nuestra tierra que forma parte fundamental del circuito escénico español». Carnero dio paso en su intervención al director del festival, Álex Rodríguez, tras destacar en él dos cualidades «indispensables para continuar con este proyecto: cabeza y corazón». Rodríguez presentó esta nueva edición, bajo el lema Mentindero de pasiones, incidiendo en que «el teatro es una verdad disfrazada de mentira y con mucha pasión» y asegurando que el medio rural seguirá siendo el protagonista del Fetal. «Se trata de un proyecto rural para el medio rural que se hace con dinero público para el público», apuntó Rodríguez, quien anunció que este verano el festival contará con dos nuevas sedes, sumando así un total de cinco escenarios. Urones de Castroponce, Valdunquillo, Mayorga de Campos, Medina de Rioseco y Villalón de Campos se repartirán de esta manera las doce funciones previstas.

El Fetal no se mueve

Álex Rodríguez comentó que, a diferencia de quien cumple 18 años y se va del medio rural, el Fetal «se queda donde está porque todavía hay mucho trabajo que hacer». El director resaltó el hecho de que en esta edición la mitad de los espectáculos están impulsados o dirigidos por mujeres, «a pesar de que el género masculino inunda el teatro, pero nosotros apostamos por la equidad y la igualdad porque es lo normal».

Rodríguez desgranó cada uno de los espectáculos que inundarán la programación durante los 20 días de duración del festival. El director destacó funciones como Coplas de la chistera, de Tahona&Fernando Arribas, que «sacará canciones y momentos mágicos de la chistera» en Valdunquillo con su propuesta de unir música y magia; ¿Qué hacemos con la abuela?, de Cross Border Project, que presenta un tipo de teatro foro en el que la participación del público será indispensable para tratar el tema del Alzhéimer; Penal de Ocaña, de Nao damores, la compañía que dirige Ana Zamora y que lleva al escenario un «trabajo humanista impresionante» o el encuentro que tendrá lugar entre tres de las directoras que participan en el Fetal, donde debatirán acerca del género llamado teatro documento. Rodríguez también mencionó el trabajo de Avanti Teatro con El profeta loco, función que reflexiona sobre el «planteamiento de la memoria histórica cristiana en España»; así como la participación de Visitants Teatre un año más, que llevarán el espectáculo sobre zancos Judit & Paul a las calles de Urones.

Además, Ana Zamora, directora de Nao damores, Mercedes Herrero, directora de Pez Luna Teatro y Ramón Enríquez, miembro de Baychimo Teatro, intervinieron para presentar sus trabajos y para agradecer la consolidación de «una utopía como son los diez años del Fetal», dijo Herrero.

Presupuesto

El Fetal cuenta este año con un presupuesto de 18.864 euros, tal y como anunció Álex Rodríguez, de los cuales 10.860 provienen de la Diputación Provincial; 4.000 de la Junta de Castilla y León; 3.504 a cuenta del Ayuntamiento de Urones de Castroponce y otros 500 euros que aporta el Museo del Pan de Mayorga de Campos. Además, Bodegas Gordoncillo donará botellas de vino para el encuentro con el público y el estudio de grabación de sonido de Dueñas colaborará con material técnico. Rodríguez aseguró que, dada la situación actual, hace «magia» con este presupuesto, por lo que agradece la cooperación de todas las entidades implicadas en la continuación del festival.

En relación a la afluencia de público y a un posible aumento debido a la ampliación de sedes, Álex Rodríguez afirmó que «no espero números, sino personas». El presidente de la Diputación, destacó la importancia de este hecho y recordó algunos de los eventos que en las últimas semanas han «imbuido de teatro Valladolid», como son el Festival de Teatro Clásico de Olmedo o el Congreso sobre el dramaturgo José Luis Alonso de Santos y su obra en la localidad de Urueña. «Valladolid es teatro», sentenció Carnero.

Los protagonistas

Ana Zamora, creadora y directora de Nao damores aseguró que la compañía teatral acude al Fetal con una nueva línea alternativa que «navega hacia el presente» y en la que ahondará en acontecimientos históricos con los que «entender lo que hemos sido para comprender lo que somos y así construir algo mejor». La obra se estructura en torno a la vida de María Josefa Canellada, abuela de Zamora, a partir de su diario personal y su correspondencia. Zamora propone un «homenaje a esta estudiante de letras en el Madrid del 36 y a toda una generación que confió en que había que seguir adelante a pesar de todo».

Por su parte, Mercedes Herrero inició su intervención con una nana, pieza que «cantamos cuando cuidamos al otro y, cuando alguien lleva 70 años, esperando lo mínimo que se merece es un abrazo», destacó Herrero, directora de la compañía Pez Luna Teatro, en referencia al argumento que trata Exhumación. Carne cruda. Este espectáculo, que cuenta la historia de cuatro mujeres vallisoletanas cuyos padres desaparecieron durante la guerra, «pretende sacar a la luz la palabra despertar, rescatar la memoria y dar voz». Herrero incidió en «la necesidad del ser humano de cerrar los círculos para poder descansar».

Por último, Ramón Enríquez, de Baychimo Teatro, compañía que presenta A pelo el último día del Fetal, apuntó que «el mejor documento que tiene el espectáculo es el actor entre comillas», quien no ejerce de manera profesional, pero aporta una visión más real y humana a la obra. Además, Enríquez destacó el deseo de la compañía de «llegar a todos los pueblos de Castilla».