Eduardo Vasco: «El espectador necesita alternativas a los canales de teletienda»

Este es el tercer shakespeare que Eduardo Vasco, al frente de la compañía Noviembre Teatro, lleva a escena, tras Hamlet y Noche de reyes. La Corrala del Palacio del Caballero será testigo esta noche de la tragedia narrada en Otelo, texto que el director madrileño ha versionado y con el que llevan girando casi un año, desde que la presentaron en el Teatro Calderón de Valladolid el pasado octubre. Eduardo Vasco es un asiduo de Olmedo Clásico y percibe de manera muy clara el carácter «especial» que tienen la villa y el festival, convertidos en «una de las citas obligadas del verano». «Se ha logrado que Olmedo tenga una dimensión cultural que muy pocos municipios pueden disfrutar ahora», afirma Vasco.

Equilibrio

El director de Otelo recalca la importancia de que el teatro «movilice cualquier tecla» del espectador y para ello, es necesario que «sea muchas cosas, no solo emoción o solo reflexión», algo que, a su parecer, se consigue en esta obra. «Está muy equilibrada porque el público se emociona, disfruta, se posiciona y se entretiene», apunta Vasco, que se muestra «sorprendido» de la acogida que ha tenido el Otelo de Noviembre Teatro. La compañía que dirige Eduardo Vasco, quien también estuvo al frente de la CNTC durante siete años, apuesta por «utilizar pocos chismes eléctricos y usar la voz, la palabra y el texto, para que el teatro sea una cuestión muy honesta y muy frontal para el público».

Respecto a las dificultades que atraviesa la cultura, Vasco resalta que «no se puede es eximir la responsabilidad de los poderes públicos, que deben entender que no todo puede ser comercial, el espectador tiene que tener alternativas a los canales de teletienda».

El director entiende el teatro como «una responsabilidad ciudadana» y festivales como el de Olmedo como «un servicio público», por lo que esta noche Noviembre Teatro se sube al escenario olmedano para presentar unos personajes «muy reconocibles» para el espectador, que no tiene que hacer ningún tipo de viaje extraño para entender la obra».