Trescientos pasajeros de Renfe, retenidos por un fallo en Villamuriel de Cerrato

Unos 300 pasajeros del tren que hacía el recorrido entre Torrelavega y Madrid quedaron atrapados a primera hora de la tarde de este lunes en la localidad palentina de Villamuriel de Cerrato después de que un problema en el enganche/desenganche de vagones impidiera continuar viaje. Después de muchos minutos sin poder solventar la incidencia, Renfe decidió fletar autobuses para trasladar a los pasajeros hasta Palencia y desde allí poder continuar viaje hasta Madrid. Fuentes de la compañía ferroviaria confirmaron que los pasajeros llegaron a su destino con hora y media de retraso.

Poco después, las pantallas de la Estación Campo Grande de Valladolid indicaban la suspensión del servicio regional Valladolid-Santander de las 18.29 minutos, también por «motivos técnicos». Una vez más la compañía se vio obligada a habilitar servicios de autobús para llevar a los pasajeros hasta la capital cántabra. La compañía ferroviaria no informó del número de pasajeros afectados.

Ambas incidencias pudieron influir en otras incidencias que se encadenaron a lo largo de la tarde de este lunes. Así, el servicio Valladolid-Madrid que tenía que haber salido a las 16.55 horas salió con más de dos horas de retraso. Ese le supuso a algunos viajeros, no solo las molestias sino por el retraso sino la pérdida de enlaces con otros trenes. Varios viajeros se acercaron a las ventanillas para intentar adquirir nuevos tickets en ferrocarriles posteriores con los que continuar. Entre los consultados por El Norte cundía el enfado y el deseo de reclamar a Renfe por los retrasos y el pago de nuevos billetes.