Los sindicatos paralizan las negociaciones hasta conocer los planes de Francia para Renault España

Renault ve «muy poco realista» la plataforma presentada por los sindicatos «pues de aplicarse encarecería los costes un 56%». «Esta situación empeoraría la competitividad y dificultaría la adjudicación de nuevos productos», señala la empresa, que ha pedido a los sindicatos «que revisen sus pretensiones con posturas más acordes a la situación actual».

El director de Recursos Humanos de Renault España, José Antonio Rodríguez, recordó la importancia de «mantener el atractivo de las plantas y de las ingenierías españolas para ser adjudicatario de productos» y apuntó que «supeditar el avance de las negociaciones a la presentación del plan estratégico supone perder la oportunidad de anticiparnos y prepararnos para el futuro».

Desde UGT dijeron sentir «inquietud» por saber «qué modelos van a venir a la factoría Palencia una vez anunciado que el Mégane será eléctrico y se fabricará en Francia; por conocer qué va a fabricar Carrocería-Montaje después del Captur, o incluso si se fabricará algún modelo conjuntamente; por saber cuál es el futuro de Motores, con la bajada del diésel y los nuevos impuestos y cambios normativos». También por saber «si los planes del grupo de reducción de las Ingenierías van a impactar o no en España» y por la suerte de «todo el tejido industrial, con empresas auxiliares, proveedores y muchos puestos de trabajo que dependen de nuestro futuro».

Los sindicatos pusieron como línea roja para la negociación conocer los planes de la empresa para las fábricas españolas. O, en palabras de CC OO, «si la dirección española no tiene capacidad de decidirlo entonces que la respuesta a nuestra exigencia venga de Francia». En esta exigencia hemos coincidido con el resto de las organizaciones que, de forma unánime, hemos pedido que se despeje el futuro, y que no vamos a ceder al chantaje de la empresa», añadieron desde CC OO.

Para la organización anarcosindicalista CGT también es fundamental «despejar el futuro de las factorías antes de abordar ningún tipo de negociación» y dijeron «no estar dispuestos a aceptar ningún chantaje de la dirección».

Pese a la insistencia en pedir que la negociación continúe a partir del momento en el que se adjudiquen a España los productos del nuevo plan, la dirección de Renault insistió en que «esa información no puede ser aportada a la negociación hasta la presentación del citado plan» y apeló a la responsabilidad de los sindicatos, al advertir de que «se compromete el futuro de las fábricas españolas si no se llega a un acuerdo antes de las adjudicaciones».