Castilla y León

El sector de la automoción reclama mejoras ante el «fracaso» del plan Moves

Así lo ha señalado Cano este viernes tras participar, junto al viceconsejero de Economía y Competitividad de la Junta de Castilla y León, Carlos Martín Tobalina, en la primera sesión del 'Think Tank' titulado 'Retos de futuro de la automoción de Castilla y León' en la que a lo largo de la mañana se debate acerca del impacto que pueden generar en el sector y en la economía las nuevas reglamentaciones europeas en el ámbito de las emisiones de vehículos.

El presidente del Facyl ha señalado que aunque el sector de la automoción en España y en Castilla y León «recupera cifras previas a la pandemia» en cuanto a fabricación, las ventas no han crecido y se han quedado en 950.000 vehículos, cuando en «prepandemia» ha habido años que se ha llegado al millón y medio.

Ello se debe, a juicio de Félix Cano, tanto a la situación socio política en el entorno europeo por las guerras en Ucrania y en Oriente Próximo, como a la inflación y a la incertidumbre que se vive en el mercado ante las nuevas tecnologías en la motorización.

Todo ello ha llevado a un «retraimiento» del mercado, a su juicio y a que, según sus datos, en el último año las ventas de vehículo usado representan «el doble» que las de nuevos, algo que advierte de que no es positivo para las políticas de sostenibilidad ambiental. Ante esta situación, el representante del sector de la automoción ha considerado necesaria una política de «restitución» de vehículos, de «saneamiento» del parque automovilístico, con ayudas a la compra de coches nuevos.

Cano ha explicado que existe el plan Moves, pero a su entender, «ha sido un fracaso» porque «se tarda mucho en gestionar y se exige muchos parámetros para poder solicitarlo», de modo que entiende que la gente «huye de tantas complicaciones». En su opinión se debería dotar de más dinero y agilizar los trámites del Plan Moves. A ello ha sumado que si se pretende que el coche eléctrico o híbrido «funcione más y se venda más», se debería potenciar la presencia de puntos de recarga, ya que asegura que España está «a la cola de Europa» en cuanto a cifra de estos elementos.

Por su parte, Martín Tobalina ha destacado que las plantas de fabricación del sector de la automoción instaladas en Castilla y León «gozan de muy buena salud», tanto Renault, como Horse, que han incrementado su producción en 2023, la transformación de la fábrica de Nissan en Ávila e Iveco, que según el viceconsejero, tiene en su planta de Valladolid «la más excelente del grupo a nivel mundial». Eso sí, ha matizado que coincide con Félix Cano en que existe «gran incertidumbre» en el sector, de modo que considera que las administraciones pueden implementar algunas medidas «que puedan ayudar a la competitividad» del sector.

En opinión de Martín Tobalina, «un exceso de capacidad, sí o sí, va a derivar en una afección directa a la estructura laboral de un sector fundamental para toda Europa», por lo que la apuesta debe ser por esa competitividad ante la competencia de «otros mercados» que van con un paso «más firme».

El viceconsejero entiende que en la Unión Europea se destinan ayudas en mayor medida a financiar la investigación, desarrollo e innovación (I+D+i), «pero no se subvencionan las capacidades industriales» y en ese caso otros mercados, como Estados Unidos, apoyan o subvencionan «directamente» la instalación de nuevas capacidades industriales.

«Europa tiene que ser capaz de revisar y tiene que ser capaz de plantear ayudas directas a la inversión para los fabricantes en las nuevas capacidades que nos permitan mantener la capacidad industrial», ha reflexionado Martín Tobalina, que ha recordado que el empleo industrial vinculado a la automoción es «fundamental» en Castilla y León.

En cuanto a las normativas de emisiones, Martín Tobalina, ha querido felicitar a las comunidades autónomas y al Gobierno de España porque considera que se hizo «un buen trabajo» para impulsar «con el liderazgo español» una «dulcificación» de la normativa Euro 7, que ha permitido que «las empresas de la automoción no se vean abocadas a una imposición normativa y a una obligación de inversiones a corto plazo que podría poner en peligro las capacidades» del sector. En ese sentido, entiende que en 2026 se abre «una ventana» para poder reconsiderar el proceso de adaptación a las nuevas tecnologías y a que pueda convivir la tecnología.

Por otra parte, al ser preguntado por el plan que pone en marcha el Gobierno de España para la reducción de la jornada laboral, Félix Cano entiende que en un primer término la industria de la automoción en Castilla y León no debería verse afectada.

En cambio, ha apostillado que cuando se reduzca a 37,5 horas semanales habrá que ver «cómo se establece» porque, por el momento, afirma que no tienen noticias sobre ello.