Procesos productivos sostenibles y respetuosos con el medio ambiente

La producción sostenible con criterios ambientales, sociales y económicos requiere de acciones continuas. Así se entiende desde Galletas Gullón, vinculada desde sus inicios al medio rural y pionera en la adopción de prácticas empresariales sostenibles y responsables con el medio ambiente.

La compañía, líder en el sector y principal fabricante de Europa, acaba de adherirse al Pacto de Economía Circular de Castilla y León, cuyo objetivo principal es fomentar la adopción de modelos de negocio que reduzcan el impacto ambiental y promuevan la sostenibilidad en la región.

Entre las medidas que se recogen en el decálogo del citado pacto están: promover la transición hacia una economía circular en su ámbito de actuación; fomentar el crecimiento económico desacoplado del consumo de materiales reduciendo la intensidad material y energética; y favorecer el I+D+i para desarrollar nuevos materiales, procesos y productos más eficientes en el uso de los recursos, con especial atención a la bioeconomía.

En este sentido, los proyectos que desde la compañía ya se llevan a cabo están totalmente en la línea de lo planteado a nivel regional y por el propio Pacto Verde Europeo y tienen que ver con: la recuperación de materiales, desperdicio alimentario, reciclaje, ecodiseño, reducción de gramaje e incorporación de material reciclado, para lo que la galletera aguilarense cuenta con un Grupo de Trabajo de Economía Circular.

Además, la compañía cree firmemente en el poder de la colaboración y la sinergia entre empresas, instituciones y la sociedad en general para abordar los desafíos ambientales que hay que enfrentar. Al unirse a este pacto, reafirma su compromiso de trabajar en conjunto con otras organizaciones y autoridades para impulsar la transición hacia un modelo económico más circular y sostenible y que tiene como retos incorporar el ecodiseño, la reparabilidad, la reutilización y la refabricación en todos sus productos y servicios; concienciar sobre economía circular y compartir y divulgar buenas prácticas en ese área que resulten inspiradoras para el conjunto de la sociedad.

Hoja de ruta

De manera concreta, Galletas Gullón ha puesto en marcha una exigente hoja de ruta que le ha permitido, por ejemplo, incorporar un 30% rPET (plástico reciclado) en los envases salados de 350 gramos que comercializa desde enero de 2024, adelantando y mejorando el objetivo de integrar, al menos, un 25% rPET en envases PET en 2025.

Además, con el fin de impulsar la gestión ambiental de manera responsable y continuar contribuyendo al desarrollo de los ODS de la Agenda 2030, Galletas Gullón ha creado los grupos de trabajo de Descarbonización y de Economía Circular, es decir, un foro de diálogo que permite a los responsables de todos los departamentos identificar, coordinar y priorizar actuaciones que faciliten la transición energética.

Gracias a ello, ha reducido un 8,44% sus emisiones de alcance 3 en 2022, lo que implica las emisiones realizadas directamente por Galletas Gullón y las indirectas que se pueden atribuir a los aprovisionamientos de materia prima y a la venta y uso de las galletas en casa de los consumidores. De este modo, el inventario GEI (gases de efecto invernadero) obtenido permite, entre otras cosas, identificar las fuentes de emisión y buscar actuaciones para reducir y contribuir al ahorro.

Esta disminución de la huella de carbono, registrada en el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico junto con su evolución anual, sitúa a Galletas Gullón un paso más cerca de su objetivo para 2030, fijado en disminuir sus emisiones un 55% en comparación con las de 2021, para lo cual la compañía necesitaría reducir su impacto una media de un 6% anual de aquí a 2030.

«En nuestro compromiso por minimizar nuestra huella en nuestro entorno, en Galletas Gullón tratamos de que nuestros procesos productivos sean lo más respetuosos posibles con el medioambiente. Por eso llevamos varios años poniendo en práctica proyectos que nos ayuden a minimizar las emisiones de carbono como, por ejemplo, el plan de movilidad sostenible para empleados que está centrado en reducir el impacto de las emisiones de alcance 3 con medidas como el aumento de autobuses de ruta, el uso de mega trailers en logística», afirma Paco Hevia, director corporativo de Galletas Gullón.

Precisamente, gracias a la disminución de su huella de carbono, la compañía avanza en su política de sostenibilidad reflejada en el Eje Ambiental del Plan Director de Negocio Responsable.

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