Castilla y León

El PP frena la ley de cuidado a enfermos terminales por su enfado con Igea

La retirada de las enmiendas populares, grupo mayoritario en las Cortes, supone un frenazo en seco a una tramitación que ha sufrido numerosas demoras con prórrogas para presentar enmiendas. El PP toma esta decisión en respuesta a lo que considera un trato «despectivo» y «chulesco» de Francisco Igea hacia el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez. Todo parte de la Comisión de Sanidad celebrada la tarde del jueves, en las Cortes. Francisco Igea presentaba una iniciativa con medidas para atajar la obesidad y reforzar los tratamientos que el PP rechazó. El de Cs publicó en un mensaje en la red social 'X' -antes Twitter- en el que hacía responsable al consejero de Sanidad, con una foto del dirigente del PP en el hemiciclo. Entienden los populares que había tras la publicación de Igea una mofa por el físico de Vázquez compatible con un caso gordofobia. «Se acabó», resaltó Raúl de la Hoz, portavoz del PP en las Cortes.

«Hoy hemos defendido con datos la necesidad de mejorar nuestras políticas contra la obesidad. Hemos intentado transaccionar con el PP quienes, tras consultar con la consejeria, han informado de que no son necesarias mejoras en la lucha contra la obesidad», reflejó Francisco Igea. Acompañó el mensaje con un vídeo de su intervención y la foto del consejero de Sanidad, al que considera «responsable» del voto en contra de los procuradores del PP a la iniciativa. Es algo que el procurador de Cs dice hacer habitualmente, vincular la propuesta que se aprueba o rechaza con el responsable de la gestión de esos temas. Y el de las medidas sanitarias sobre la obesidad era Alejandro Vázquez. «No iba a publicar la foto de otra persona», precisa.

«Hasta aquí hemos llegado con este personaje: bufonadas, provocaciones e insultos constantes a los miembros del PP, siempre con muy mal gusto. Pero esta ha sido la gota que ha colmado el vaso de nuestra paciencia. Y encima en un tema tan sensible como la obesidad. Se acabó», replicó el portavoz popular en las Cortes, Raúl de la Hoz. Ese 'hasta aquí hemos llegado' ha tenido como primera consecuencia la retirada de las enmiendas del PP a la proposición de ley de Derechos y Garantías de las Personas al Final de su Vida, lo que sume el futuro de este texto en la incertidumbre. Fuentes del grupo parlamentario apuntaron que decidirán en próximos días cómo se va a avanzar con el mismo e insistieron en la «macarrería» de Francisco Igea.

El exvicepresidente de la Junta ha calificado la reacción de «despropósito» y «sobreactuación», achacando al decisión a un enconamiento «personal» del portavoz Raúl de la Hoz hacia él. Igea defiende que no había nada de ofensivo en su mensaje. «No era mi intención que nadie se diese por ofendido, si no hacer ver que el responsable de que no saliese adelante la iniciativa sobre la obesidad era el consejero de Sanidad. Con él consultaron los procuradores del PP y fue el que dijo que no», remarca el procurador de Cs. «¿De verdad me están diciendo que paralizan una ley sobre derechos para personas enfermas al final de la vida por esto? Es un disparate», añade Igea.

Esta es la secuencia de los mensajes que ha impactado, como daño colateral, en la ya procelosa tramitación de la ley autonómica sobre derecho de las personas al final de la vida. que la 'repesca' de hace un año ofreció al proyecto normativo. De la Hoz e Igea intercambiaron mensajes de réplica y dúplica en su perfiles sociales.

«Te rogaría que repases mis intervenciones en esa comisión defendiendo la proposición no de ley con datos y evidencias. Mi intención constructiva de intentar llegar a una transacción. No he emitido ni un solo comentario malsonante. La consejeria se ha negado a una transacción ¿ Cual es el problema?», esgrime Francisco Igea.

«Llegas tarde para intentar justificar lo injustificable, ahora que te has dado cuenta que, como tantas veces, has vuelto a meter la pata. El chistecito sobre la condición física del consejero de Sanidad, es simplemente imperdonable. Repito: se acabó», concluyó De la Hoz. Y ese ostracismo que el PP ha decidido aplicar a Igea en las Cortes empieza por la norma 'repescada' hace un año y que había ofrecido a la regulación autonómica de atención a pacientes terminales una segunda oportunidad que ahora peligra.