Patronal y sindicatos esperan que el nuevo plan restaure «la confianza perdida» en la Junta

El orden del día de la reunión incluía el inicio de la elaboración del nuevo Plan de Choque por el Empleo comprometido en el Pacto para la Recuperación firmado por la Junta, PSOE, PP Ciudadanos, Podemos y Por Ávila; así como iniciar la negociación de las cuatro mesas que deben trabajar en la III Estrategia Integrada de Empleo; Dependencia;el IV Acuerdo Marco de Competitividad Industrial;y el Acuerdo de Transición Justa para el Cambio Climático.

El secretario regional de CC OO, Vicente Andrés, afeó a Fernández Mañueco que haya tardado tres meses en responder a la petición de la reunión y lamentó «el distanciamiento demostrado por el presidente respecto del segundo gran problema del país tras el sanitario». No obstante, desde una «preocupación que no se disipará hasta ver los hechos», expresó su deseo de «mirar hacia adelante». «Nuestra responsabilidad es poner todo de nuestra parte en todas las mesas de negociación y esperar que se dejen a un lado los incumplimientos del pasado».

Tanto Andrés como su homólogo en UGT, Faustino Temprano, señalaron que dentro del Plan de Choque –que debería estar listo en tres semanas, dijeron– «negociarán» y «tratarán de lograr un acuerdo» en cuanto a la inclusión de un nuevo complemento para la protección de personas afectadas por Expedientes de Regulación de Empleo (ERTE) por causas organizativas, técnicas o de producción, o para colectivos especialmente vulnerables, como los mayores de 55 años.

«Estaremos muy atentos al día a día porque la confianza y la lealtad se recupera con hechos –manifestó Temprano–. El asunto de las mesas con nuevos participantes ha quedado superado porque ha quedado claro que nosotros no vetamos a nadie, pero que el Diálogo Social no es 'información' sino 'concertación' y cada cual tiene su cauce para expresarse».

Santiago Aparicio mostró su satisfacción por que el plan «se va a poner en marcha muy rápidamente» e incluirá nuevas líneas de financiación. «Las empresas necesitan mucha liquidez y la van a seguir necesitando en 2021, que va a ser un año muy penoso –manifestó–. Debemos salvaguardar el mayor número de empresas posible porque así se protege el empleo y para ello hace falta crédito con mayores periodos de carencia y hasta diez años de amortización, ya que la recuperación será lenta y puede haber moras y concursos de acreedores».

«Hemos pedido que haya una cantidad suficiente porque lo dispuesto hasta ahora a través de Iberaval ha sido bienvenido pero muy limitado y, al final, insuficiente», señaló Aparicio.