La patronal regional, Cecale, ve más riesgos que ventajas en un hipotético cierre total de la actividad empresarial en España, como han sugerido algunas comunidades. El propio presidente de la Junta pidió el domingo la paralización de toda actividad industrial «no esencial» para reducir el ... número de contagios. La Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León, por contra, señaló ayer que «apoya el anuncio del Gobierno de prorrogar 15 días el estado de alarma», pero «solicita que no se extienda a nuevas actividades económicas de las ya afectadas, pues tendría grandes consecuencias» para la economía regional y los ciudadanos.
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Para Cecale debe analizarse cada caso antes de tomar una decisión, para no entorpecer el funcionamiento del sector primario, bloquear el transporte y la industria alimentaria o provocar «el cierre irreversible de empresas».
Por otro lado, la patronal vallisoletana, CVE, ha demandado una moratoria fiscal de tres meses como fórmula para garantizar la liquidez y supervivencia de las empresas, que «producen sin poder dar salida a sus productos, no ingresan, están sufriendo la ruptura de la cadena de pago y tienen grandes dificultades para mantener el empleo y hacer frente a sus obligaciones tributarias».
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