Salvador Cruz, en su despacho de las Cortes. ALBERTO MINGUEZA
Portavoz adjunto del PP en las Cortes

Salvador Cruz: «El Partido Popular, al menos en Salamanca, debe ganar en dinamismo»

El procurador salmantino defiende que los casos de corrupción del PP «se magnifican» cuando, explica, son más numerosos los del PSOE

Antonio G. Encinas

Valladolid

Domingo, 13 de junio 2021, 08:51

Salvador Cruz es portavoz adjunto en las Cortes y a la vez uno de los rostros visibles de esa lista impulsada por Génova para liderar el PP de Salamanca, cuyo congreso espera un acuerdo para tener fecha.

Publicidad

-Con usted es obligado empezar por el ... asunto de Salamanca, donde figuraba en una lista para optar a la Presidencia.

-Confío en que podamos llegar a una solución mejor para todos y evitar la confrontación. El partido necesita ilusión y ese fue el proceso de reflexión que hicimos algunos internamente. El partido tiene que dinamizarse. Estamos en un buen momento político para el PP, hay que aprovecharlo y es esencial, tanto a nivel autonómico como provincial como nacional, que el partido permanezca unido. Pero eso no quiere decir que no pueda haber planteamientos de reflexión interna de hacia dónde debe ir el partido. Y el partido debe ganar en dinamismo. Por lo menos en Salamanca. Y cuanto más dinámico sea el partido, mejor para el conjunto de los afiliados, los cargos públicos, y mejor será el resultado para el PP.

-Siempre es complicada la renovación en los partidos.

-Históricamente siempre ha sido así. En todas las formaciones políticas. Llevo mucho tiempo en política, viví un congreso de renovación cuando me acababa de afiliar al PP y es verdad que cuando hay cambios en las direcciones nacionales, estos procesos de renovación se vienen dando. Lo ha habido en el PSOE, con Pedro Sánchez cuando llegó y ganó el congreso a Susana Díaz contra todo pronóstico. Lo está habiendo en el PP tras la llegada de Pablo Casado. Y lo hubo en su momento, en los años 1993-94, con la llegada de Aznar a la presidencia del PP. En nuestro caso ese proceso llevó a una victoria masiva en el año 1995. No puedes unir solo la renovación a las victorias electorales, porque las circunstancias las marca la tendencia de la política nacional. Y hoy es verdad que, por primera vez, el PP se sitúa después de tres años al frente de las encuestas electorales. La única que no ha dicho eso es el CIS. Y estamos viviendo un momento político que ha cambiado en un margen escaso de tiempo. Hace tres meses la situación era totalmente distinta. Y hay que aprovechar esa situación para demostrar a la sociedad que hay un partido preparado para gobernar en España y recuperar una mayoría importante en Castilla y León, como acaba de demostrar la última encuesta, que plantea que Alfonso Fernández Mañueco ganaría, a día de hoy, con mayoría absoluta.

-Quizá el hecho de gobernar frenó lo que ocurre siempre tras un batacazo electoral, que es una renovación drástica. Y eso ha hecho también que haya más reticencias internas al cambio.

-No lo creo, el PP hizo una buena gestión después de el resultado de las autonómicas, que nos permitió gobernar. El contexto de esas elecciones era muy negativo para el PP en el panorama nacional y se demostró también en ese resultado negativo a nivel nacional y en el conjunto de las comunidades. Pero esa buena gestión nos permitió mantener el gobierno en muchas comunidades. Castilla y León, Madrid, Andalucía, Murcia. Mantuvimos un poder autonómico importante, con cuatro comunidades, alguna de ellas históricamente gobernadas por el PP, como Castilla y León y Madrid.

Publicidad

«El partido debe tener vida, que sus órganos de gobierno se reúnan, que tengan actividad»

-En el momento que empiezan a convocarse los congresos y surge esa corriente crítica en Salamanca se le encasilla, se le llama «desleal», «enviado de Génova…»

-No voy a entrar en eso.

-Pero, ¿cómo se convive con eso? Porque tiene sentado delante, en el hemiciclo, a Alfonso Fernández Mañueco.

-Me siento detrás de Alfonso Fernández Mañueco, soy leal a él, trabajo todos los días en estas Cortes para defender las políticas de la Junta de Castilla y León, creo que se ha hecho una magnífica gestión durante la pandemia y el resultado se está viendo en las encuestas. La tendencia es buena, pero si no se hubiera hecho esa gestión, esa tendencia alcista en Castilla y León no sería tal. Fernández Mañueco ha consolidado la calidad de los servicios públicos de una comunidad que ha sido líder en servicios públicos, en el contexto de una pandemia. Estamos siendo líderes en vacunación y hay una buena gestión detrás. Eso no impide que haya que reflexionar y que el partido tenga que mejorar algunos aspectos internos. Lo que digan otros me importa poco.

Publicidad

-¿Qué aspectos internos son esos?

-Dinamismo. Cuando hablo de dinamismo es tener más actividad de partido. No se critica la forma de trabajar de las instituciones, pero el partido debe tener vida propia. Que sus órganos de gobierno funcionen, que se reúnan, que tengan actividad, que el afiliado tenga un contacto más directo con el conjunto de los que lideran el partido. Y eso, especialmente en los últimos años, en Salamanca no ha pasado. Es una reflexión mía y de otras muchas personas del PP en Salamanca. No soy el que lidera este movimiento, pero sí creo que hay cosas mejorables. Y el partido se puede plantear esas cuestiones.

-Algunas de esas cosas que menciona son las que presume Vox de utilizar para atraer afiliados, en un momento en el que trata de expandirse a costa, claro, del PP.

-Desconozco cuál es el trato de Vox internamente. Parece que es un partido muy piramidal, por lo que veo en los medios de comunicación, muy jerarquizado. Y el PP es lo contrario. Nace y tiene su fuerza en la implantación de los territorios. No hay prácticamente un pueblo de los 2.248 en el que no haya nadie del PP que defienda sus ideas. Lo hemos demostrado históricamente presentando candidaturas en prácticamente todos los municipios, y en el 98% de los casos con personas que tienen vinculación con los municipios. Somos modelos políticos antagónicos. Uno, muy jerarquizado y el nuestro, recogiendo la estructura y el peso político de las bases y de nuestra gente en una comunidad con mucha dispersión geográfica, con 2.248 municipios y 2.232 entidades locales menores. Y a esa gente hay que mimarla, cuidarla.

Publicidad

-Quizá las mayorías absolutas relajan.

-Las mayorías absolutas relajan y las no mayorías incentivan. Pero el Gobierno de Castilla y León, a lo largo de estos treinta años, ha tenido un apoyo masivo. Esta comunidad es un referente en la prestación de servicios públicos. Somos referentes en Educación, políticas sociales, tramitación de la dependencia… Tenemos una sanidad que los propios usuarios califican en los barómetros con un notable alto. Tenemos unos servicios públicos pegados al territorio. Mantenemos colegios abiertos con 3 alumnos. Son políticas que llegan, que la gente aprecia y fruto de una gestión de lo que siempre denominó el presidente Herrera como «autonomismo útil».

-El PP ahora tiene el viento de cola. Pero hay mucha volatilidad. Tras Cataluña, el PP iba a desaparecer. Tras Madrid, el PP va a gobernar con mayoría absoluta.

-La llegada de las nuevas formaciones políticas desde el 15M ha generado inestabilidad política en el conjunto de España y estas fluctuaciones se han visto. Ahora y en 2019. El PP obtuvo muy mal resultado en abril y mejoró sustancialmente en noviembre. La inestabilidad política genera una serie de problemas, como inestabilidad económica. Este país estaba acostumbrado a un bipartidismo, quizá no un bipartidismo puro, con alternancia en el Gobierno. Y la llegada de estas nuevas formaciones plantea una segregación de la fidelidad de voto a algunas formaciones, como al PSOE o a nosotros, y cuando una de esas alternativas tiene una caída, vuelven a crecer. A nosotros nos afectaron mucho los casos de corrupción, Ciudadanos creció, apareció Vox, luego Ciudadanos empezó a caer, subió Vox… En febrero la situación era distinta a la de junio. El PP ha recuperado casi 10 puntos en intención de voto, según las encuestas, del 20% a un 28-30% en un escaso margen de tiempo.

Publicidad

Salvador Cruz, en el pasillo donde se ubican los despachos del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes. ALBERTO MINGUEZA

-Eso ha contribuido también a que Teodoro García Egea viniera a calmar la situación y a pedir tranquilidad y poco ruido en los congresos.

-Un secretario general tiene que estar pegado al territorio y la dirección nacional, como la regional, debe estarlo. Y lo enmarco en una situación de normalidad. La dirección nacional debe conocer el territorio, es necesario salir de los despachos para estar con la gente en cada provincia. Igual que las direcciones regionales deben visitar, en el caso de Castilla y León, cada provincia de la comunidad. Y los secretarios provinciales deben pisar las comarcas y conocer las necesidades de los municipios y la realidad social. Si no sales del despacho, desconoces la realidad social.

Noticia Patrocinada

-¿Vamos hacia la reunificación del espectro de la derecha? Aunque está subiendo Vox.

-Es verdad que está subiendo Vox pero, tras una subida exponencial, la última encuesta en Castilla y León no le da ese crecimiento que esperaban. El mensaje que hay que lanzar es que el único partido que puede ser alternativa al sanchismo es el PP de Pablo Casado y Alfonso Fernández Mañueco.

-Lo del sanchismo se repite mucho en las Cortes.

-A lo mejor es muy manido, los debates en el Pleno… Pero Sánchez está llevando un modelo de Gobierno en el que está todo muy personalizado. El pasado miércoles [en la votación de la proposición para instar al Gobierno a no conceder los indultos a los presos del procés] algunos, en la votación decían «por España» y yo creo que estaban votando «no por Sánchez». Ha hecho un Gobierno muy personalista, en el que todo gira en torno a él y algunos dicen que en torno a su jefe de gabinete. Y eso lleva a que se hable de sanchismo. Como él decía en su obra, es un ejemplo de «manual de resistencia». Está dispuesto a cualquier cosa por resistir.

Publicidad

-Estamos viendo que los gobiernos de coalición castigan mucho al más débil, en este caso a Ciudadanos. ¿Cree que se va a mantener la calma hasta final de legislatura, con un socio con tantas corrientes internas?

-La relación con Ciudadanos, hablo de las Cortes, es buena, estrecha, presentamos iniciativas conjuntamente. Hay buena sintonía. Y fruto de ella creo que no hay problema para acabar la legislatura, y es lo que ha puesto de compromiso Alfonso Fernández Mañueco. Quedan dos años, tras una situación muy compleja en la que la pandemia lo ha acaparado todo. Y llega el momento de poder dedicarse a las políticas destinadas a la recuperación económica y a la mejora de los servicios públicos. Está pendiente la llegada de fondos europeos y hay buena sintonía para acabar la legislatura.

Publicidad

-Fernández Mañueco tiene aún el obstáculo de la financiación de las primarias del PP en Salamanca, que está judicializado.

-Ya hubo un auto de archivo por parte de un juez, aunque es verdad que se pidió una ampliación de la prueba testifical y se está llevando a efecto. Pero estoy convencido de que, como en la mayoría de los casos, es más un tema mediático que jurídico. Es verdad que cuando existe esa presión parece más importante de lo que es, pero el auto inicial del juez espero que pueda ser el auto definitivo.

-Hablaba usted de la corrupción que afectó al PP en su momento. Va a ser difícil quitar esa mancha.

-Cuando hay un caso en el PP se magnifica y cuando es en otros partidos parece que importa menos al conjunto de la sociedad. Es verdad que hemos tenido una lacra con la corrupción que nos ha pasado factura electoral. Y hay muchos líderes del PP que han tenido penas de banquillo, porque luego se han archivado parte de los procedimientos. Recuerdo el caso de Rita Barberá, de Francisco Camps. Tuvieron una repercusión brutal. Creo que hay una estrategia de intentar mover los supuestos casos de corrupción del PP. La realidad, y es un ejercicio de comparación, es que el partido que más casos de corrupción ha tenido en la historia de este país es el PSOE y además casos, la mayoría, vinculados a malversación de fondos públicos. Y casos tan grave como los ERE, que suponían 600 millones de euros. Aquí llevamos hablando ni más ni menos que seis años de dos procedimientos judiciales pendientes aún de juicio oral. Y todas las semanas el PSOE mueve la bandera de la corrupción. Comenzamos un procedimiento en las eólicas con muchísimos imputados y cada vez van quedando menos y a ver cómo acaba. Pero el PSOE agita la bandera de la corrupción cuando el primer partido condenado por sentencia firme del Tribunal Supremo, en este país, fue el PSOE en la época del señor González.

Publicidad

-El retraso de la justicia, máxime en estas causas, es tremendo.

-La justicia es lenta, pero llega. Cuando se han intentado agilizar los procedimientos para la instrucción de los expedientes, el PP lo intentó y planteó unos límites. Hay casos que se estudian durante años. Y eso provoca esas penas de banquillo que a la gente que le afectan no recupera su honor, que queda seriamente en entredicho.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad