La ciudad burgalesa de Miranda de Ebro -35.000 habitantes-, y los municipios vallisoletanos de Íscar -6.400- y Pedrajas de San Esteban -3.300- seguirán confinados, según publica esta mañana la Junta de Castilla y León en el Boletín Oficial de la Comunidad.
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Según se recoge en la nota de prensa remitida por el Gobierno regional, para la localidad burgalesa se decreta una ampliación de las medidas restrictivas durante otras dos semanas a partir de la madrugada del domingo 11 de octubre; hasta el día 26.
En el caso de Íscar y Pedrajas de San Esteban, se suman otros siete días a unas restricciones que en principio terminaban este sábado. Así, ambos municipios mantendrán su cierre perimetral hasta el viernes de la semana que viene.
Ambas órdenes quedan a la espera de la ratificación judicial de las medidas restrictivas que recogen.
Como informa Ical, las medidas implementadas con el fin de evitar la transmisión comunitaria de la covid-19 se refieren a la movilidad y circulación de las personas, así como al desarrollo de diversas actividades que, por sus características, puedan favorecer la propagación de la pandemia por el SARS-CoV-2 y que son las que ya se habían establecido hasta el momento.
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