Miles de personas reclaman sueldos más altos en Castilla y León

Cerca de ocho mil personas, según la estimación oficial de la Delegación del Gobierno (27.400 personas, según los sindicatos), participaron en las diferentes manifestaciones, donde además de la petición a la patronal para la mejora de las condiciones salariales de los trabajadores, las críticas a la Junta de Castilla y León por el «desmantelamiento» del diálogo social también estuvieron presentes.

En la convocatoria autonómica de la manifestación, celebrada en Valladolid con la presencia 2.000 personas (14.000 según los convocantes), el lema principal de la pancarta que encabezaba la movilización pedía 'Subir salarios, bajar precios, repartir beneficios'. Tras ella, una riada de personas salieron desde la plaza de Colón para, tras llenar la Acera de Recoletos desde la cabeza a la cola, enfilar el camino hacia la Plaza Mayor, donde se leyó el manifiesto conjunto antes de continuar con la jornada reivindicativa con una paellada y conciertos de vuelta a Recoletos.

No faltaron las banderas de CC OO y UGT, así como los lemas de diferentes sectores, como el maderero, el de los pensionistas o el de la industria, con peticiones por «un trabajo decente» y «más derechos, igualdad y cohesión». Tampoco faltaron pancartas más genéricas, como la que señalaba que «los derechos se conquistan y se defienden» o aquella que reivindicaba la «unidad de clase contra el fascismo».

También se cantaron consignas como «nosotros producimos, nosotros decidimos», en un ambiente festivo gracias al acompañamiento de la manifestación por parte del grupo 'Batuccadoos', que con la percusión fue animando a los asistentes en una concentración en la que también estuvieron presentes buena parte de los miembros de la candidatura de Valladolid Toma La Palabra al Ayuntamiento de Valladolid, encabezados por su número uno, María Sánchez.

Las marchas, a su vez. contaron con una nutrida presencia de cargos socialistas. El líder autonómico, Luis Tudanca, asistió a la de Burgos, donde afirmó que ellos están en la calle con los trabajadores, mientras que otros, desde las instituciones, en referencia a PP y Vox, se quieren «cargar todos los avances sociales».

En León, la manifestación del Primero de Mayo mezcló fiesta y reivindicación, con la asistencia de unas 1.500 personas (3.000 según los organizadores). Encabezada por los responsables provinciales de CC OO y UGT en León, Ignacio Fernández y Enrique Reguero, la marcha partió a las 12:00 horas de la sede de los sindicatos en la Gran Vía de San Marcos y recorrió las principales principales calles del centro de la capital leonesa hasta llegar a la plaza Botines.

Entre los asistentes destacó la presencia del alcalde, José Antonio Díez, y del secretario general del PSOE de León y diputado nacional, Javier Alfonso Cendón. Además de mejoras laborales y un reparto más equilibrado de la riqueza, con subidas de salarios y bajadas en los precios, el acto sirvió para reivindicar la firma de los 14 convenios pendientes de negociar en la provincia y para reprochar a PP y Vox la ruptura del acuerdo del diálogo social.

Por su parte, en Ponferrada cerca de 300 personas (500 según los organizadores) recorrieron las calles de la capital del Bierzo tras una pancarta que llamaba a subir salarios, bajar precios y repartir beneficios, en la manifestación convocada por CC OO y UGT por del día internacional de los trabajadores. Acompañada por el sonido de una 'batucada', la marcha partió de la sede de los sindicatos, en la avenida Valdés, y finalizó en la plaza de Fernando Miranda.

En sus intervenciones, los máximos responsables de las dos grandes centrales sindicales en la comarca, Ursicino Sánchez (CC OO) y Omar Rodríguez (UGT), apelaron a la necesidad de mejorar las infraestructuras de la comarca y lamentaron la escasa asistencia al acto. También asistieron a la manifestación el alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón, y el presidente del Consejo Comarcal del Bierzo, Gerardo Álvarez Courel; así como ediles y representantes de distintas candidaturas y formaciones que se presentan el próximo 28 de mayo a las elecciones municipales.

En torno a 1.500 personas marcharon este lunes, Primero de Mayo, por las principales arterias de Salamanca para reivindicar, principalmente, un aumento de los salarios de la clase trabajadora, así como un descenso de los precios. A mediodía, desde la sede de los sindicatos mayoritarios, UGT y CC OO, partió una comitiva que remontó la Gran Vía hasta la plaza de España para subir por la avenida Mirat hasta la Puerta de Zamora y, desde allí, tomar el paseo Carmelitas hasta Ramón y Cajal y Prior para culminar, como cada año, en la Plaza Mayor, donde tuvo lugar la lectura de un manifiesto.

El secretario general de CC OO de Salamanca, José Antonio Gallego, lamentó al inicio de la manifestación, desde su misma cabecera, que la subida de precios está siendo «voraz» y, sobre todo, «está castigando a la clase trabajadora, fundamentalmente, a las partes más vulnerables». «Solicitamos al Gobierno medidas más contundentes y seguimos reclamando una fiscalidad más progresiva que grave más a las grandes fortunas y sean más amable con las clases trabajadoras», añadió.

Por su parte, el secretario general de UGT, Marcelino Muñoz, destacó el carácter «festivo» de la jornada y sacó pecho por lucir su «orgullo de clase». «Los salarios están en el epicentro de las reivindicaciones para el día de hoy. No podemos permitir que, como ocurrió en la otra crisis, seamos los trabajadores los que paguemos la fiesta de una inflación desbocada. Entonces, pedimos que se controlen los precios», manifestó, sosteniendo la pancarta principal que rezaba el lema 'Subir salarios, bajar precios, repartir beneficios'.

Tras los sindicatos mayoritarios, UGT y CC OO, se dejaron ver cargos públicos del Partido Socialista, así como miembros de otras organizaciones sindicales y sociales, que lucieron sus propias pancartas y anagramas. Entre ellas, a lo largo de la comitiva, las Juventudes Comunistas, los más ruidosos, además de miembros de CGT, colectivos contra la OTAN, los 'Yayogaitas' reivindicando una mejora de las pensiones, el sindicato educativo Stecyl, la CNT, miembros del colectivo LGTBI Iguales y, cerrando la marcha, miembros de la 'Iglesia por el trabajo decente'.

La jornada festiva y reivindicativa convocada por UGT y CC OO en la comunidad se completó con las manifestaciones celebradas en el resto de capitales de provincia de Castilla y León, así como en las localidades de Aranda de Duero, Medina del Campo, Miranda de Ebro y el municipio palentino de Aguilar de Campoo. El número de asistentes cifrado por los sindicatos en cada una de ellas se elevó a 600 en Ávila (250 según la estimación oficial de la Delegación del Gobierno), 100 en Aguilar de Campoo (40), 300 en Aranda de Duero (125), 3.000 en Burgos (460), 350 en Miranda de Ebro (200), 800 en Palencia (700) y otras tantas en Segovia (500) y en Soria (450), 150 en Medina del Campo (100) y 1.500 en Zamora (200), informa Ical.