Castilla y León

Mañueco reivindica una ley de concordia «más completa» entre acusaciones de blanquear el franquismo

«Esa normativa no tiene más derechos, tiene más derechas», ha replicado Tudanca, que ha acusado al presidente de «entregar las llaves de Castilla y León al franquismo» y «enterrar el legado» de Juan Vicente Herrera. El decreto aprobado en 2018 suponía el reconocimiento del PP de Castilla y León a la memoria democrática, condenando el golpe de estado y la Dictadura y apoyando a las víctimas tras 40 años de Democracia. El líder socialista ha acusado también al presidente de faltar a su compromiso ético y a su palabra, después de que en 2020 votara a favor de una iniciativa para homenajear a Rafael Abril, un ferroviario asesinado en 1936 cuyos restos fueron depositados en el Valle de los Caídos, y a otros represaliados.

Tudanca, que ha hecho alusión a las últimas declaraciones de Mañueco en las que hizo uso de la RAE para definir la dictadura franquista, ha tildado la situación actual de «retroceso democrático», después de que haya desaparecido de la web de la Junta, según anuncia, el mapa de las fosas comunes que fue financiado con fondos autonómicos.

El socialista ha finalizado su intervención recriminando al mandatario que la ley «blanquea la dictadura» y que pretende «volver a condenar con el silencio a las víctimas». A continuación, le ha recordado que la Unión Europea establece como uno de los principios que deben regir las normativas de memoria histórica la no repetición, momento en que ha enseñado una foto del exalcalde de Salamanca, Marcelo Fernández Nieto, padre del presidente, paseando en un descapotable junto a Franco. «Nadie es responsable de los pecados de sus padres, pero sí somos responsables de que no vuelvan a repetirse, señor Mañueco», sentenciaba el procurador socialista, entre el aplauso de su bancada.

«Nosotros estamos con todas las víctimas, sea cual sea su condición, no diferencie usted entre víctimas buenas y víctimas malas», se ha defendido el presidente, que ha cargado contra el PSOE y contra el Gobierno, acusándolos de romper el «consenso constitucional» con la ley de Amnistía. Además el presidente ha devuelto a Tudanca las acusaciones de blanquear «el franquismo y el terrorismo», sacando a la palestra la ley de Memoria Democrática aprobada en 2021, que «han escrito con los herederos de ETA». Mañueco hacía referencia a la enmienda pactada con EH Bildu para crear una comisión que estudie las vulneraciones de derechos humanos entre 1978 y 1983, año en que el que se inicia la denominada guerra sucia con los GAL y «en el que había un socialista de presidente», ha recordado Mañueco. El mandatario ha concluido su réplica acusando al PSOE de querer «tapar sus miserias, sus mordidas repugnantes y sus comisiones indecentes» en alusión al caso Koldo.

Por el proyecto legislativo de concordia ha preguntado también Pablo Fernández, procurador de Unidas Podemos, al que Mañueco le ha recriminado «contaminar de ideología todo lo que toca», tras cuestionarle si es «correcto y adecuado» aprobar una ley que blanquea la dictadura franquista». Fernández, que ha hecho caso omiso a las acusaciones de Mañueco, ha culpado al líder popular de «adecuar las leyes a su ideología franquista». Tras una retahíla de descalificaciones sobre el texto presentado, que ha resumido como una una «ley de mierda» que mancilla la palabra concordia, ha culpado al gobierno «fascista neofranquista» de pretender «hacer un ajuste de cuentas», al equiparar a las víctimas del franquismo con sus verdugos.

«Usted piensa, se comporta y actúa como un franquista» ha reiterado Fernández contra el presidente, al recordar que durante su etapa como alcalde de Salamanca se negó durante años a retirar de la Plaza Mayor la placa de la «rata» Franco. El medallón finalmente fue apartado por incumplir la ley de Memoria Histórica. «Por eso usted está tan contento de gobernar con el fascismo de Vox, porque usted es uno de los suyos», ha rematado.

«Su visión de la historia está sesgada por su fanatismo ideológico», contestaba acto seguido Mañueco al procurador del grupo mixto sin demasiada contundencia. «No ha sido capaz de contar bien los hechos ocurridos hace unos pocos años», le ha reprendido, sin aclarar más detalles al respecto y tildando a Fernández de «vertedero de odio y sectario».

Durante la réplica a Fernández, Mañueco ha vuelto a insistir en que la norma «quiere ampliar y proteger a las víctimas» durante un mayor periodo. Y ha echado mano de nuevo de las políticas estatales, al recordarle a Fernández que había sido un «firme defensor» de la ley del solo sí es sí, impulsada desde su partido por la entonces ministra de Igualdad, Irene Montero, que había dejado «más de 1300 reducciones de condenas a agresores sexuales».

Luis Mariano Santos, representante de UPL, que durante su turno de palabra ha afeado al ejecutivo vivir en la polémica «para que los ciudadanos se olviden de lo importante», ha acusado al Gobierno autonómico de hacer lo mismo que recriminan a Sánchez por captar «13 votos», refiriéndose a las procuradores de Vox. El leonés ha mostrado también su rechazo a una ley de concordia que «niega el rigor histórico» y que «pone en evidencia que sean un partido de estado» y les ha pedido que se centren en trabajar para el «desarrollo de las regiones de Castilla y León». Ante esto Mañueco ha presumido de los presupuestos más altos de la historia de Castilla y León y de ser «una comunidad líder en servicios públicos».