La Junta recauda el 19% más que antes de la pandemia gracias a Sucesiones y Donaciones

El pasado mes de mayo entró en vigor la reducción del 99% en la cuota a pagar por Sucesiones y Donaciones, lo que supone su práctica supresión para cónyuges, ascendentes o descendientes, y también para miembros de uniones de hecho con convivencia estable. Tras dejar en el erario autonómico 156,10 millones entre enero y octubre de 2019, un año después su recaudación caía a 133,65 millones en el mismo periodo. En 2021, este impuesto ha proporcionado 229,10 millones, lo que supone aumentos del 71% con respecto a 2020 y del 46% frente a 2019.

Semejante progresión ha provocado que la recaudación por este tributo sobrepase la de Transmisiones Patrimoniales por primera vez en seis años. Se da la circunstancia de que la subida de Sucesiones y Donaciones aplicada por la Consejería de Hacienda en 2013, en plena recesión, hizo que en 2014 se situase como el más lucrativo para las arcas autonómicas, adelantando a Transmisiones Patrimoniales (ITP), que es el que se abona en las compraventas de vivienda usada.

Éste, cuya recaudación ascendió a 177,18 millones en 2019, vio cómo caía a 144,69 millones en el año de la pandemia. En la actualidad, los 206,20 millones que ha aportado hasta el pasado octubre, suponen unos avances del 42,5% con respecto al año pasado y del 16,3% frente a 2019. El tipo general del ITP es del 8%, que se reduce al 4% si el inmueble va a constituir la vivienda habitual o si va a ser la sede social o centro de trabajo de empresas o negocios profesionales. Si es una empresa en un municipio o entidad local menor de Castilla y León de menos de 10.000 habitantes, el tipo es del 3% y el año próximo bajará al 2%.

El tercer tributo que más fondos genera es Actos Jurídicos Documentados, cuyos 81,80 millones de este año suponen avances similares a los de Transmisiones con respecto a los últimos dos ejercicios, si bien algo menores.

El Impuesto sobre el Patrimonio, que abonan los contribuyentes cuyos bienes y derechos superan los dos millones de euros, aporta en 2021 un montante de 38,44 millones, por encima de los 36,36 del año pasado y de los 32,49 de un año antes.

De los tributos cedidos por el Estado y gestionados por la Junta el único que no ha superado las cifras de 2019 es el del Juego, cuyos 36,70 millones superan los 26 de 2020, pero no los 44,5 millones de 2019.

Por otro lado, de las dos figuras impositivas propias de la comunidad, Eliminación de Residuos aún está entre un 4% y un 7% por debajo de la recaudación de los últimos dos años; mientras que Afección Medioambiental registra ligeros incrementos.

Para el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, el buen ritmo de incremento de la recaudación demuestra que es compatible bajar los impuestos, mejorar las bases imponibles y a la vez ingresar más». Recuerda, en este sentido, que Castilla y León, que el año pasado ocupaba el puesto número 13 en el Índice Autonómico de Competitividad Fiscal elaborado por la Tax Foundation, ha subido en 2021 siete posiciones en la clasificación general, hasta la sexta plaza, debido sobre todo a la reforma del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones. La Junta fijó una deducción del 99% entre padres, hijos y cónyuges.

Pero además, destaca, «la propia dinamización de actos sucesorios y de donaciones ha tenido un efecto dominó sobre el conjunto de tributos, haciendo que se produzca también una mayor recaudación, en especial en el caso de Transmisiones Patrimoniales», explica el consejero, que pone en valor el aumento de ingresos ya que «no siempre sucede que subiendo los impuestos se recaude más».

Según señala, las donaciones se han multiplicado por 13 y aunque aquellas que se dan entre familiares directos aportan solo el 1%, muchas acaban convirtiéndose en adquisiciones de locales o terrenos para abrir un negocio o de viviendas. «Castilla y León ha estado varios meses en la primera posición autonómica por número de transmisiones de derechos de la propiedad, lo que demuestra que estamos ante una medida que ha servido para apoyar a los jóvenes en su emprendimiento».

Por otra parte, admite que el exceso de mortalidad provocado por la pandemia de covid también se ha traducido en un mayor número de herencias y pagos por Sucesiones, al igual que todas las comunidades.

En cuanto a las previsiones para el cierre del año, destaca que «todo apunta a que seguirá el crecimiento y así lo hemos previsto en los presupuestos del año próximo, en los que se recoge un incremento del 5,8% sobre los datos de 2021». «Las expectativas de recaudación son buenas, en paralelo al aumento de actividad productiva».

El hecho de que uno de los pocos tributos que aún no ha alcanzado el nivel de ingresos precovid sea el de los medios de transporte lleva a Fernández Carriedo a advertir contra la política fiscal de Ejecutivo de Pedro Sánchez. «Cuando se sube el impuesto de matriculaciones, se aumentan los gravámenes de los carburantes, se ponen peajes en la autovías... todo esto retrae el consumo y tiene el efecto negativo de posicionar a todo el sector en el punto de mira de las subidas impositivas en un momento en que, además, sufre el problema de la falta de productos», advierte.