La Junta duplicará el presupuesto destinado a exhumaciones por la memoria histórica

La propuesta socialista fue secundada, aunque enmendada por el Partido Popular, por todos los grupos del hemiciclo, con excepción de Vox. 78 votos a favor y 1 en contra. Incluso Francisco Igea, que habló en nombre del Gobierno autonómico, anunció la «intención de la Junta de seguir incrementando los fondos para la exhumación y reparación de las víctimas».

Una intención que se traducirá en que se doblarán las ayudas para las exhumaciones hasta llegar a los 200.000 euros, aunque cuando se pueda diseñar el nuevo presupuesto –en abril, aproximadamente, debería ponerse sobre la mesa– se pretende dotar esta cuestión «de la manera debida». Miguel Ángel González, procurador de Ciudadanos, vino a explicar en qué consistirá esta «dotación adecuada» cuando expuso los compromisos que ha adquirido el Gobierno autonómico. «Se reducirán las trabas burocráticas para facilitar solicitudes de particulares y asociaciones; se aumentarán las subvenciones para las entidades colaboradoras; se elaborarán mapas de las fosas; se introducirá la memoria histórica en las aulas con una versión no politizada basada en criterios históricos y científicos; se reforzará la colaboración con la administración central, tanto en lo relativo al Centro Documental de la Memoria Histórica como en cuanto al banco de ADN», enumeró.

Mercedes Abril tuvo tiempo de escuchar el debate, que resultó conciliador pero con matices. El PP aportó algunas variaciones al texto original que fueron aceptadas por el PSOE por mor de conseguir ese consenso anhelado y casi unánime. En lugar de «reconocer» a las «personas represaliadas» se redactó «reconocer y honrar» a quienes «padecieron las consecuencias de la guerra civil y la dictadura franquista y sufrieron violencia por su ideología, sexo, orientación sexual o religión, así como a sus familias».

Fue la manera de aglutinar todas las sensibilidades, que ya esbozaron en algún momento de sus intervenciones los procuradores de PP y Ciudadanos. Miguel Ángel González (Cs)lo apuntó así: «Reconocimiento a estas víctimas que llegan con esta proposición y a todas las no mencionadas hoy, porque les une lo que padecieron». Y Mercedes Cófraces (PP):«Reconocer y apoyar a todos los ciudadanos, a todos los ciudadanos –enfatizó– que sufrieron directamente o en la personas de sus familiares, las consecuencias de la tragedia, de la guerra civil o de la represión de la dictadura».

La voz discrepante del voto contrario la puso Jesús García-Conde, de Vox, que puso un ejemplo para argumentar su 'no'. «En esta cámara se ha tomado como ejemplo de esta represión a las '13 Rosas', pero no se ha hablado de las 14 mártires concepcionistas, cuatro de ellas castellanas y leonesas, asesinadas durante la guerra por el delito de ser monjas de clausura. Los cuerpos de dos de ellas no han sido encontrados nunca, están también en fosas comunes. Ellas murieron perdonando a sus enemigos, para ellas no se pide homenaje, por eso el espíritu de reconciliación es más que sospechoso», arguyó.

La respuesta de Unidas Podemos resultó contundente en las formas. «En este país no habrá auténtica reparación hasta que no se recuperen todos y cada uno de los restos de todas y cada una de las víctimas que fueron asesinadas por el régimen franquista», dijo Pablo Fernández antes de llamar «formación fascista de ultra-ultra derecha» a Vox. Y Tudanca, para zanjar un debate que salió adelante sin casi oposición, quiso matizar que, a pesar de aceptar la enmienda, no puede haber «equidistancia». «Hubo golpistas y demócratas, luchadores por la libertad y asesinos. No hubo dos bandos iguales, como no hubo víctimas equiparables. A algunas víctimas ya se les hizo el debido homenaje. Durante 40 años».

Mercedes Abril, ovacionada tras la intervención de Tudanca, observó desde el balcón de invitados la pantalla con los 78 votos a favor de recuperar, entre otros, los restos de su padre Rafael.