Igea insiste en que los consultorios rurales están abiertos y agradece a Tudanca «que lo haya entendido»

No será como antes de la covid-19. Nada de establecer una consulta del médico, pongamos por caso, todos los lunes, miércoles y viernes a las 10:00 horas y que los vecinos hagan cola en el descansillo que sirve de sala de espera para que el doctor valore lo que les pasa, firme partes de baja o actualice las recetas.

«Por fin hemos conseguido que se entendiera, que la gente entendiera y los partidos de la oposición entendieran que la cita previa, la cita telefónica no era un capricho. Ese es el origen de ese acuerdo que hemos alcanzado. Es la Consejería de Sanidad la que determina las medidas de seguridad y cómo se abre o no se abre», enfatizó Francisco Igea.

El vicepresidente manifestó que la iniciativa presentada por el PSOE respalda el planteamiento de la Junta. Es decir, que quien se mueve respecto al conflicto de los consultorios es la oposición y no el Ejecutivo autonómico. «Es exactamente lo que hemos dicho día tras día, nos alegramos de que el PSOE haya entendido la necesidad de lo que defendíamos», agradeció Francisco Igea.

«El sistema sanitario entero está abierto», reiteró Verónica Casado. «Pero con el cuidado necesario. Es importante establecer el triaje telefónico», añadió. Eso implica, continuó la consejera, llamar al centro de salud y hablar con el médico que es quien decide, tras valorar los síntomas que presenta, si es necesario ver al paciente y valora si es más adecuado hacerlo en el consultorio, en su casa o en el centro de salud.

La consejera destacó la otra parte de la resolución parlamentaria que acompaña a la garantía de «asistencia sanitaria presencial» y que reflejaba que siempre debe primar el cumplimiento de las medidas de seguridad que estipule la autoridad sanitaria: salas de espera con posibilidad de mantener distancias y doble circuito. Ahí, Verónica Casado, abrió la puerta a establecer un doble circuito temporal, puesto que no es posible en la mayor parte de los consultorios tener dos espacios diferenciados para enfermos covid y para el resto. Estos últimos a primera hora y los enfermos de coronavirus o sospecha de padecerlo a última, «para permitir la desinfección posterior», afirmó. Y siempre, con cita previa.

Respecto a las movilizaciones en los pueblos y las campañas de recogidas de solicitando una atención como la que tenían antes de que se declarara la pandemia, Casado señaló que todos esos movimientos le producen «mucha pena». La consejera apuntó que hay zonas libres de infecciones y sería triste que «por no hacer las cosas bien, tuviéramos brotes en el medio rural».

Verónica Casado relató una conversación que había mantenido con un médico de un pueblo burgalés con 46 tarjetas sanitarias, que citó en el consultorio a seis pacientes crónicos para hacerles el seguimiento. «Cuando llegó estaban esperándole los 46 que residen sin guardar distancias, eso no puede ser», aseguró.

Sobre la «normalización» de la «presencialidad» en los consultorios, Verónica Casado avanzó que tomarán decisiones en función del virus. «No puedo decir si será en octubre, en septiembre o en agosto». Pero incluso entonces, se mantendrá la cita previa.