Los niños ucranianos y el presidente de Fundación Madrina, Conrado Giménez (de rojo), en un acto en Salamanca. Formigo/ ical
Guerra en Ucrania

La Fiscalía investiga el trato a 87 huérfanos ucranianos internos en Salamanca

Voluntarios de la Fundación Madrina denuncian las condiciones «insalubres» del colegio | La Junta se hace cargo de la tutela

Antonio Corbillón

Valladolid

Jueves, 28 de julio 2022, 00:13

La Consejería de Familia se ha hecho cargo de la tutela de los 87 niños ucranianos que llegaron a un colegio en Armenteros (Salamanca) después de retirarle la custodia a la Fundación Madrina. Esta decisión se produce después de que Servicios Sociales inspeccionara el ... centro para contrastar las denuncias de varios voluntarios sobre supuestas «deficiencias y carencias» de medios y «opacidad» en la gestión de los fondos que ha recibido Madrina. La retirada de la tutela se produjo tras dar cuenta a la Fiscalía de Menores.

Publicidad

De entre 7 y 17 años y procedentes de un orfanato de Donesk (la zona más afectada por la guerra) llegaron a Salamanca el 1 abril en un avión del Ministerio de Defensa. Fue el mayor contingente en los albores del conflicto. La mayoría con alguna discapacidad, salieron del país en una operación capitalizada por Conrado Giménez, el carismático fundador y presidente de Madrina que en campaña 'SosUkraine' ha logrado sacar a 1.600 personas del país centroeuropeo.

Tras barajar varios destinos, los menores y sus 17 tutores se establecieron en el colegio La Inmaculada de esta pequeña localidad salmantina donde pusieron a su disposición un abandonado colegio de religiosos que ha recibido durante décadas a cientos de niños extranjeros.

Armenteros se convirtió en sinónimo de solidaridad con el pueblo ucraniano. Giménez visitaba los platós de televisión para reclamar fondos. Se trata de un ex gestor de capitales en grandes bancos que creó su fundación hace dos décadas después de sufrir un accidente que le llevó a «sentir una revelación».

Se cierra el grifo

Desde el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, a varios alcaldes de toda Salamanca, Armenteros fue lugar de peregrinación con el compromiso de no le faltara nada a los niños. Durante tres meses y medio, Fundación Madrina cubrió todas sus necesidades.

Publicidad

Pero hace unos días publicó en su web un aviso en el que advertía de que «a partir de ahora no recaudará más donativos para el orfanato». Un anuncio que coincidió con las primeras denuncias de varios voluntarios respecto a las condiciones «insalubres» del colegio y a sus dudas sobre el destino de los muchos miles de euros que ha recibido la organización humanitaria. La mayoría de los 17 profesores de los niños han ido abandonado el centro. Conrado Giménez he eludido los reiterados intentos de El Norte para que dé su versión.

La Consejería de Familia ha confirmado que, desde el 11 de julio, la Junta se ha hecho cargo de estos jóvenes, «a fin de garantizar su atención y debido a que su estancia en nuestra comunidad se va a prolongar en el tiempo». Una gestión que «se ha comunicado a las autoridades ucranianas», explican en Familia. De hecho, estos niños llegaron a España bajo el estatus de menores no acompañados, por lo su Embajada sigue siendo su tutela.

Publicidad

Desde el 12 de julio, la organización ACCEM, con competencias, experiencia e infraestructura en acogimiento internacional, gestiona este centro, según confirman sus responsables. Dado que el conflicto bélico se prolongará en el tiempo, el objetivo de la Junta es buscar un nuevo centro de acogida en la comunidad y en el que «puedan permanecer estos niños juntos».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad