Los datos de la Junta muestran una mortalidad similar en residencias públicas y privadas en la pandemia

En total, murieron 4.406 residentes de los 43.551 que vivían en estos centros cuando comenzó la pandemia. O mejor dicho, cuando comenzó la contabilidad oficial de la Junta, el 14 de marzo de 2020. De ellos, 2.027 fallecieron en los hospitales con covid confirmado y 72, con posible infección por Sars-cov-2. Otros 2.307 murieron en los centros residenciales, más de la mitad de ellos con covid confirmado, 1.287, y el resto con sospechas de padecerlo.

La mayor parte de estos decesos en los centros residenciales se produjeron en las primeras semanas de expansión de la pandemia, entre el 14 de marzo y el 21 de junio, cuando se contabilizaron 692 con la etiqueta «covid confirmado» y 1.020 con «covid posible». El total de fallecidos entonces fue de 2.561, lo que significa que dos de cada tres personas mayores murieron en sus centros residenciales y no en los hospitales durante el primer golpe de la pandemia: 832 en residencias privadas, 462 en centros públicos y 418 en los que son sin ánimo de lucro (congregaciones religiosas, oenegés). 849 personas fenecieron en los hospitales en ese periodo, el más expuesto a los contagios.

En esas semanas fue la residencia de Mensajeros de La Paz, en la Bañeza, la que registró más fallecimientos, con 71 de 234 residentes. Le siguió Domusvi, en Arroyo de La Encomienda (Valladolid), con 61 de sus 218 plazas ocupadas. La pública de personas asistidas en Segovia fue la tercera, con 55 de 275 residentes fallecidos en esa primera oleada.

Entre junio de 2020 y marzo de 2021, época de muchas restricciones a la movilidad y a las visitas, se produjeron brotes relevantes en algunos centros y muchos sufrieron pérdidas importantes. En Zaratán, Valladolid, Plaza Real contabilizó 34 fallecidos de 174 plazas de las que dispone. El Hogar San José, de Palencia, y la residencia Reina de la Paz, de Zamora, perdieron a 29 y 28 residentes, respectivamente.

Y entonces llegó la vacunación. Comenzó en el mes de diciembre de 2020, de modo casi simbólico, y se aceleró en el mes de enero de 2021, con muchas precauciones aún porque había que esperar un tiempo entre las dos primeras dosis para garantizar la eficacia y porque la población que primero comenzó a inmunizarse fue la más vulnerable. Desde el 15 de marzo de 2021 hasta el 19 de junio de ese mismo año la Junta contabiliza cinco fallecimientos en cinco residencias distintas.

Sin embargo, en los siguientes cuatro meses se registaron 13 fallecidos en El Fontán, en Nava del Rey; 10 en la de Ciudad de Dueñas; 10 en la de Ciudad de Benavente. Y así hasta sumar 115 muertes en 41 centros.