![«El éxito reside en saber adaptarse a las circunstancias y trabajar y trabajar»](https://s2.ppllstatics.com/elnortedecastilla/www/multimedia/201803/23/media/cortadas/magdaleno-kPuE-U5013782905221EC-1248x770@El%20Norte.jpg)
![«El éxito reside en saber adaptarse a las circunstancias y trabajar y trabajar»](https://s2.ppllstatics.com/elnortedecastilla/www/multimedia/201803/23/media/cortadas/magdaleno-kPuE-U5013782905221EC-1248x770@El%20Norte.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
A. D.
Viernes, 23 de marzo 2018
Rodeado de caras conocidas, amigos, familiares y compañeros en el mundo del emprendimiento y la innovación, Carlos Magdaleno, director general de Ambuibérica, se sintió cómodo y tranquilo, en un escenario que no pisaba por primera vez. «Hace cuatro años también fui premiado», apuntó al iniciar la conferencia inaugural de este noveno encuentro empresarial y en la que compartió sus aciertos y desaciertos, en lo que el mismo definió como «la historia de mi vida es la historia de un hobby».
Defendiendo los valores que Tierra de Campos le impregnó, aludió con cierta nostalgia a sus inicios en Mayorga, cuando con 18 años, propuso a su padre comprar su primera ambulancia, tras descubrir este nicho de negocio, cuando realizaba el servicio militar obligatorio en Cruz Roja. Actualmente, Ambuibérica cuenta con una flota de más 4.000 vehículos y 9.000 empleados por prácticamente todo el territorio nacional y con sedes también en el extranjero.
Internacionalización
Precisamente, la internacionalización y el miedo a no equivocarse, -«he hecho un mapa con los baches que me he ido encontrando»- hizo que se aventurase a probar suerte en Latinoamérica, en dos países y con diferente resultado. Su primer salto fue a Perú, en concreto, a Lima, una ciudad que «me recordó a la España de hace 30 años» y que le animó a trasladar el mismo modelo de negocio que había desarrollado aquí. «Cuando me dijeron: no quieras ser Pizarro, me dí cuenta de que me había equivocado», apuntó. Con este ejemplo, Magdaleno recomienda que «lo que hay que hacer es adaptarse a las circunstancias». Y de esta primera experiencia fallida aprendió los errores que no cometería en su segunda incursión en territorio latinoamericano.
Esta vez fue en Sao Paulo, dónde «conocí, me adapté y crecí», explicó. En este sentido reconoció tener un catálogo de «todas las posibilidades para crecer». Sin embargo, una parte importante de su éxito, además del «trabajo y más trabajo» se la debe a su familia y a los consejos de su padre del que recordó le decía, «unos valen para hacer cosas y otros para criticarlas» y «los listos aprenden hasta de los tontos».
Además, Carlos Magdaleno hizo un llamamiento de unidad al sector empresarial y emprendendor para avanzar y generar empleo y riqueza «aunque las condiciones sean adversas». Y por otro lado, animó a la participación de las mujeres en el tejido empresarial, dónde «hay que llevar a cabo planes de integración», apuntó en referencia a las cuotas de género para que estas dejen de ser necesarias.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.