Verónica Casado, tras el Consejo de Gobierno, que actualizó el listado de municipios afectados por las restricciones L. P.-Ical
Covid

Cuatro de cada diez ciudadanos de Castilla y León no pueden tomar café dentro de un bar

Entre los 31 muncipios con restricción hostelera se mantienen Valladolid, Salamanca, Palencia, Segovia, Burgos y Soria, se incorporan Ponferrada, Guardo, Arévalo, Laguna de Duero, Peñafiel y Olmedo y se quedan en puertas León y Tordesillas

Susana Escribano

Valladolid

Lunes, 19 de abril 2021, 15:28

Tomar un café o almorzar bajo techo, a cubierto, en un bar o restaurante está vedado para cuatro de cada diez ciudadanos de Castilla y León. Son los alrededor de 985.000 residentes en las 31 localidades que tienen cerrado el interior ... de la hostelería, con Valladolid, Salamanca, Burgos, Palencia, Segovia y Soria a la cabeza. Pero también en Miranda de Ebro, San Andrés de Rabanedo o Ponferrada la actividad queda restringida a las terrazas.

Publicidad

La ciudad berciana se suma desde este martes, 20 de abril, al consumo al aire libre, al superar la incidencia de 150 positivos de covid-19 por 100.000 habitantes en 14 días y la consejera de Sanidad, Verónica Casado, avisó de que León capital, con una incidencia acumulada de 140 casos en dos semanas, saca boletos para el próximo lunes.

La responsable autonómica ha informado, tras el Consejo de Gobierno celebrado este lunes y en el que se decidió la actualización del listado de localidades, de que ninguna de las capitales ha mejorado lo suficiente tras catorce días con el interior de locales cerrados como para autorizar su reapertura. Algo que sí se da en Tudela de Duero, Venta de Baños y Villamuriel, en el alfoz de Palencia, la localidad salmantina de Carbajosa de la Sagrada y la segoviana de El Espinar. Los clientes vuelven a poder traspasar la puerta de sus bares y restaurantes.

Podría haberles acompañado La Cistérniga, porque su incidencia ha bajado hasta los 110 casos, pero la Junta estipuló que el mínimo de aplicación era de dos semanas y el municipio del cinturón de Valladolid estrenó la restricción el martes pasado. Los negocios deberán aguantar chapados siete días más.

Publicidad

La consejera ha defendido la efectividad de la medida, pese a que la incidencia en las cinco capitales tras los 14 días de cierre de interiores de negocios hosteleros no ha bajado significativamente o ha aumentado. «Sí funciona, claro, el cierre de interiores funciona, siempre que se ha cerrado ha bajado la incidencia», ha remarcado Verónica Casado. La consejera ha pedido prudencia a los ciudadanos y control «estricto» de aforos y cumplimiento de normas a los titulares de negocios «para cortar las cadenas de transmisión del virus», que se mueve más «en la zonas con alta densidad de población».

Casado ha explicado que uno de cada dos brotes son intrafamiliares, pero que la otra mitad son mixtos, de reuniones familiares y contactos en espacios cerrados en los que las personas se quitan la mascarilla. Ahí es donde encajan bares y restaurantes, centro de unas restricciones que son «lo más preventivas y lo más quirúrgicas posible», ha argumentado la responsable sanitaria.

Publicidad

Los municipios que estrenarán esta restricción hostelera son, además de Ponferrada, Arévalo, Guardo y Laguna de Duero, Peñafiel y Olmedo. La prohibición de trabajar el interior de bares y restaurantes se aplica a localidades de más de 5.000 habitantes que superan esa incidencia a 14 días de 150 diagnósticos. Olmedo no llega a esa población, pero el acumulado de positivos es explosivo. Asciende a 1.261 casos por 100.000 habitantes en las últimas dos semanas.

Además de mantener el cierre en La Cistérniga, el listado de localidades que llevaban una o dos semanas con el interior hostelero clausurado para el servicio al público son Arenas de San Pedro, Briviesca, Lerma y Medina de Pomar, La Pola de Gordón, y Villablino, Aguilar de Campoo y Cervera de Pisuerga; Béjar, Santa Marta de Tormes, Villamayor y Villares de la Reina; Palazuelos de Eresma y Riaza; El Burgo de Osma y Aldeamayor de San Martín.

Publicidad

La consejera ha reiterado su petición de máximo control, además de en León, en Tordesillas y la localidad soriana de Almazán, que se quedan a las puertas de las restricciones y podrían ver cómo cierran los interiores de sus bares y restaurantes el próximo lunes, si mantienen la tendencia de contagios. La Villa del Tratado rozó este lunes el cierre de su hostelería con una incidencia acumulada de 148,6 casos a 14 días. Tiene una semana de tregua.

Las reacciones a la actualización del listado que oficializará el Bocyl (Boletín de Castilla y León) fueron inmediatas. El alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón, ha solicitado a los ciudadanos responsabilidad en el cumplimiento de las medidas anticovid. Su grupo municipal, el del PSOE, lamentó el cierre hostelero e instó a la Junta a incrementar las vacunaciones.

Publicidad

No gustó la extensión de la medida a Arévalo a Carlos García, presidente de la Diputación de Ávila y del PP abulense. El dirigente popular defendió que el Gobierno que preside su jefe de filas autonómico, Alfonso Fernández Mañueco, debería «sopesar el daño que se va a hacer a la hostelería de Arévalo si se cierra el interior de los establecimientos» al haber superado la localidad, «por escasísimo margen», los 150 casos por cien mil habitantes de incidencia, informa Ical. Carlos García vaticinó que puede ser «la puntilla» para los profesionales de Arévalo.

Muy contundente volvió a ser la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de Valladolid, que atribuyó la decisión a la consejera Casado y al vicepresidente de la Junta, Francisco Igea, a los que tildó de «verdaderos francotiradores» contra el sector. «Otros 14 días sin ingresar. Eso sí, la obligación de pagar no nos la quita nadie. La consejera ha pedido paciencia, ¿le parece poca la paciencia que este sector está teniendo?», se preguntan desde la asociación profesional.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad