Salvador Illa, en la rueda de prensa posterior al Consejo Interterritorial de Salud de esta tarde. J. Hellín-E.P.
Coronavirus

Castilla y León podrá endurecer las medidas para Navidad si se produce un repunte

Los alivios del toque de queda y del cierre perimetral para las fiestas podrán revisarse si la recuperación se frena

Antonio G. Encinas

Valladolid

Miércoles, 16 de diciembre 2020, 19:38

Nada más concluir el Consejo Interterritorial de Salud, el consejero canario intervino en directo para anunciar nuevas restricciones en su territorio. Era la primera comunidad autónoma que recogía la invitación del Ministerio de Sanidad de endurecer las medidas de prevención si lo consideraba necesario. Un ... endurecimiento que queda en manos de las comunidades autónomas, puesto que no se pactó un nuevo documento para la época navideña. Ahí están los niveles de alerta y las medidas preventivas que se acordaron el 22 de octubre y el plan de alivio del 2 de diciembre y sobre esos criterios y restricciones tendrán que actuar los territorios. «Se ha acordado que las comunidades autónomas pueden aplicar medidas más restrictivas: cierre perimetral, encuentros con familiares y allegados, limitación de la movilidad nocturna y eventos navideños», resumió el Ministerio de Salvador Illa.

Publicidad

Y Castilla y León ya tiene activadas varias de esas restricciones a niveles importantes. El toque de queda a las 22 horas. El cierre perimetral de la región hasta el 10 de enero. No queda mucho margen de actuación, salvo en las cuestiones más directamente relacionadas con las fiestas. Esto es, los alivios navideños. Se había decretado una 'ventana' en el cierre perimetral para los días 23 a 26 de diciembre, 30 de diciembre a 2 de enero y 5 y 6 de enero. Fechas en las que se podría acceder a Castilla y León (o salir de la comunidad autónoma). También se había decidido acortar el toque de queda los días 24 y 31 de diciembre y 5 de enero, permitiendo la movilidad hasta la 1:30 de la madrugada. Y se había permitido un máximo de 10 personas en las reuniones navideñas.

pensas de lo que puedan indicar los datos. Lo anunció así el ministro de Sanidad, Salvador Illa. «Podrán restringir a menos de 10 los comensales, la movilidad de familiares y allegados y ser más estrictos en movilidad nocturna en los días de Nochebuena y Nochevieja», explicó en rueda de prensa. Pero serán las comunidades autónomas quienes decidan si actúan en ese sentido o no. Nada de un nuevo acuerdo, como proponía Castilla y León, enfocado únicamente a la época navideña. Para estudiar niveles de alerta y restricciones ya está el documento que se viene utilizando en los últimos dos meses.

En Castilla y León los datos muestran una «ralentización de la recuperación» pero en el resto de España empiezan a preocupar seriamente. «Hay una tendencia de crecimiento de la pandemia en los últimos días», dijo Illa. Y esa tendencia se analizó en el Consejo Interterritorial. «Preocupación» es el sentimiento que predomina entre los consejeros de Sanidad de las comunidades autónomas, según explicó Illa, porque este repunte de los datos se produce antes de las fiestas navideñas y después de un puente festivo que en Castilla y León, por ejemplo, ha estado marcado por la inactividad y la escasez de desplazamientos, según se desprende de los datos del Ministerio de Transportes.

Publicidad

Castilla y León anotó 502 casos más este miércoles, y otros 26 fallecidos

«Hay que tomar medidas en las ocho comunidades autónomas donde se ha producido este aumento», advirtió Illa. Y Castilla y León se encuentra fuera de ese grupo de ocho. La comunidad autónoma ha pasado de ocupar el primer puesto de incidencia acumulada al sexto y ya baja de los 200 casos por cien mil habitantes. Cabe recordar, llegados a este punto, que la nueva normalidad se sitúa en 25. En el debe, además, hay que añadir que aún se anotaron este miércoles 502 casos y se registraron 26 fallecimientos (9 de ellos en residencias).

Ocurre que Castilla y León tendrá que analizar todas estas cuestiones en un momento delicado. Por un lado, se aprecia que la bajada de la incidencia acumulada es cada vez más lenta. Por otro, aún es pronto para saber los efectos de la reapertura de los centros comerciales y los establecimientos de hostelería. La incidencia acumulada a 7 días, que puede dar alguna pista, muestra estancamientos generalizados e incluso algún repunte en Palencia (de 178 a 221 desde el día 10), Segovia (de 45 a 54 en el mismo periodo). Zamora o Soria presentan ligeras mejorías en este indicador, que sirve para anticipar la evolución de la pandemia.

Publicidad

Así, el Consejo de Gobierno se reunirá este jueves con todas estas circunstancias sobre la mesa y tendrá que decidir si actúa de inmediato o si espera hasta la semana que viene –las vacaciones escolares comienzan el 23– para poder comprobar la evolución y tomar medidas en función de lo que ocurra.

Aforos y hostelería

Otra de las cuestiones sobre las que se puede actuar, en función de los niveles de alerta, son los aforos. Y los hosteleros salieron ayer al paso de unas declaraciones de Pedro Sánchez sobre posibles restricciones en este sector clave de la economía nacional. «Unas nuevas restricciones a la hostelería, como parece avisar el presidente del Gobierno, significarían de una forma definitiva la ruina del sector», fue la respuesta de los hosteleros por boca de María José Hernández  (vicepresidenta Confederación de Hostelería y Turismo de Castilla y León). Habló de que se «criminaliza» a un sector y apuntó que un nuevo cierre acabaría «con el 50% de los negocios de hostelería».

Publicidad

Y es que mientras los hosteleros insisten en que sus negocios son seguros, se encuentran con situaciones difíciles de combatir. El restaurante Niza, de Valladolid, colgaba ayer en sus redes sociales la reproducción de un diálogo real con un cliente al que le explicaron el protocolo sanitario que aplicaban en el comedor. «Si solo me puedo quitar la mascarilla para comer no quiero quedarme», fue la queja del cliente. «Que sepa que gracias a personas como usted estamos como estamos», fue la respuesta del restaurante, que añadía que esto se producía «nueve meses de pandemia y cuatro meses cerrados después».

La ocupación de camas UCI por enfermos de covid-19 es aún elevada. El nivel de alerta es el máximo (4) en seis provincias. En el resto –Ávila, Salamanca ySegovia– es aún alto (el 3). El rebote desde tanta altura, advierten los expertos, sería demoledor en lo sanitario y catastrófico en lo económico.

Publicidad

.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad