Castilla y León es la comunidad con menor cobertura de fibra óptica

Con una dispersión de la población como el que sufre la comunidad, que además concentra el 27% de los municipios de España (2.248 de 8.131), el despliegue de la red en los núcleos rurales avanza a golpe de subvenciones como las de los programas UNICO (Programa de Universalización de Infraestructuras Digitales para la Cohesión o el PEBA-NGA (Programa de Extensión de la Banda Ancha de Nueva Generación). Este último ya ha concluido, mientras que el primero tiene como fecha de finalización el 31 de diciembre de 2024.

Las previsiones de cobertura de redes fijas a velocidades de descarga ≥ 100 Mbps tras la finalización de los proyectos con ayuda concedida son del 95,75% de las viviendas en el conjunto de España y del 94,26% en Castilla y León y, de cumplirse, la región adelantará a Asturias, Extremadura, Aragón y Galicia.

La comunidad tiene 2.383.139 de habitantes repartidos en 1.775.470 de viviendas familiares, según los datos del INE y el Catastro de 2022. Suponen en 5,02% y el 6,81% del total español, respectivamente. Valladolid es la provincia más grande de la comunidad, con 519.361 personas y 287.012 viviendas, lo que representa el 21,79% y el 16,16% de la comunidad, respectivamente.

La fibra óptica es el medio de transmisión con mejores características en cuanto a alta capacidad y baja atenuación, lo que lo hace idóneo para ser utilizado en las redes de telecomunicaciones de muy alta velocidad, ya que permite enviar grandes cantidades de datos a largas distancias. Las redes puras de fibra óptica están compuestas enteramente por cables de fibra óptica, por lo que también se conocen como redes de fibra hasta el hogar (Fibre To The Home, FTTH). Son muchos los pueblos pequeños cuyos vecinos siguen esperando su llegada. Allí donde aparece, el impacto es inmediato.

Las viviendas de Castilla y León están 14 puntos porcentuales por debajo de la media nacional en cobertura mediante este tipo de fibra y también se sitúan por debajo en el resto de tecnologías: en VDSL (líneas de abonado digital sobre pares de cobre, una evolución del ADSL que permiten una velocidad de bajada de hasta 30 Mbps) la media regional es del 9,99%, frente al 10,65% nacional; en HFC (fibra óptica complementada en el último tramo de conexión con el usuario con cable coaxial, con transmisión de datos a velocidades de 100 Mbps o superiores) del 31,20% frente al 32,07% y en sistemas inalámbricos de servicio fijo (ondas con sistemas WiMAX o 4G), del 43,86% frente al 59,54%.

También a la cola de España se encuentra Castilla y León en cuanto a cobertura de 5G, la última generación de tecnología móvil de muy alta velocidad y capacidad así como baja latencia, con velocidades en movilidad superiores a 100 Mbit/s y picos de 1 Gbit/s. La cobertura es aquí del 68,20% de las viviendas, frente al 82,36% nacional. Solo Castilla-La Mancha presenta peor ratio, con el 55,70%.

De esta manera, en condiciones de máxima demanda, la tasa de cobertura a más de 1 Giga por segundo de descarga es del 71,50% en Castilla y León frente al 84,96% nacional, una tasa solo empeorada por murcia, con 71,19%.

En cobertura de fibra óptica, solo Valladolid supera la media nacional (92,74% en la provincia, casi dos puntos por encima del total de España), aunque no sucede lo mismo en cobertura de 5G (74,05%, más de ocho puntos por debajo). Zamora (71,40%) en la provincia española con menor cobertura de la fibra óptica y la quinta con peor 5G (53,58%), solo por delante de Teruel, Ciudad Real, Cuenca y Huesca.

Mas de 300 operadores han aportado sus datos de cobertura para la elaboración del informe facilitado por el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital. Junto con las 'tres grandes' (Telefónica, Orange y Vodafone), compañías medianas, pequeñas y ultra-locales están dedicadas a la labor de llevar la fibra óptica a los miles de municipios de la comunidad.

Una de ellas es Adamo, que en los últimos cinco años ha llevado su red de internet ultrarrápido a 165.000 hogares de 800 poblaciones de la comunidad y que es una de las empresas adjudicatarias de la subvención europea para extender la fibra óptica en Salamanca, Ávila, Zamora, León y Valladolid. Para ello recibirá 19 millones de euros, cantidad que completará con otros 11 de fondos propios para que otras 72.000 familias que residen en zonas aisladas y dispersas de esas cinco provincias tengan acceso a internet de alta velocidad.

El Programa de Banda Ancha a Nueva Generación y el Programa UNICO, financiados por el Estado y la UE, han movilizado en los dos últimos años más de 300 millones de presupuesto público-privado para llevar la fibra óptica a cerca de 950.000 hogares españoles ubicados en el ámbito rural de 24 provincias.

«Esta tecnología se sitúa como uno de los elementos fundamentales para ayudar a fijar habitantes en el territorio y frenar, así, la despoblación, el temido fenómeno que se reproduce en numerosas poblaciones de Castilla y León y causa estragos sociales, económicos e, incluso, vitales», destacan desde Adamo. Enrique Capdevila, responsable de la empresa barcelonesa en la región señala que «la fibra óptica permite realizar con plenas garantías actividades hoy habituales: teletrabajo, educación 'online', compras por internet, citas médicas telemáticas o disfrutar de videojuegos, series y películas en remoto, entre otras».

Manuel de la Guía, director de Desarrollo de Negocio de Fibritel, señala que este operador rural presente en zonas rurales de Castilla León, Castilla-La Mancha y Extremadura apuesta «por crecer en los pequeños municipios para contribuir a disminuir la brecha digital entre las zonas urbanas y rurales». Nuestro objetivo es convertirnos en el operador de referencia con paquetes accesibles y adaptando la oferta a las necesidades del cliente», explica.

Fibritel opera en las provincias de Ávila, Burgos, León, Palencia, Salamanca, Segovia, Valladolid y Zamora y de las 778 localidades donde se ha desplegado, 122 son núcleos rurales de menos de 50 hogares, que suman en total 3.683 viviendas conectadas. La compañía pone como ejemplo la reciente conexión del municipio segoviano de Bernuy de Coca, que con solo 16 habitantes censados cuenta desde hace unos meses con fibra óptica. El Ayuntamiento tiene previsto reabrir un pequeño local desde el que ofrecía a los vecinos el uso de ordenadores con conexión y que permanecía cerrada por las dificultades para conectarse.