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La ley electoral, con las circunscripciones provinciales, tiene un doble efecto que hace que fuerzas como Ciudadanos, Podemos, Vox o Izquierda Unida dependan mucho de ... una caída dramática de PSOE o PP para conquistar un espacio propio. Por un lado, las provincias más pequeñas apenas dejan un resquicio para que la tercera fuerza en liza pueda aspirar a un escaño. Soria solo otorga cinco sillones, por seis de Segovia y siete de Palencia, Ávila y Zamora. En cinco elecciones autonómicas Ávila repartió todos los puestos entre PP y PSOE, en el auge del bipartidismo. En Zamora sucedió lo mismo en 6 ocasiones; por siete de Segovia y Palencia.Y en Soria, en 9 de los 10 comicios no hubo más agraciados que PP y PSOE.
La ley D'Hont reparte los escaños con una fórmula matemática que divide los votos de cada partido en cada circunscripción por todos los escaños de esa circunscripción. Por ejemplo. En Soria, en 2019, el PSOEobtuvo 19.732 votos. El PP, 13.387. La tercera formación fue Ciudadanos, con 5.448. Cada resultado se divide por 1, 2, 3, 4 y 5, el número de escaños que se distribuyen en este caso. Los cinco mayores cocientes se adjudican los puestos. Con estas diferencias en el voto, los 4 primeros quedan asignados de entrada a PSOE y PP. La división entre 3 les daba a los socialistas 6.577, cifra aún mayor que los obtenidos por Cs, que se quedaba fuera.
El hecho de que haya circunscripciones provinciales beneficia, como ocurre con las elecciones generales y los partidos nacionalistas, a aquellas formaciones con una fuerte implantación en un determinado territorio, como UPL, que llegó a tener 3 procuradores, o Por Ávila. Izquierda Unida, con 31.352 votos en toda Castilla y León, se quedó sin representación en 2019, mientras que Por Ávila, con 9.447 en su provincia, logró un escaño.
De los 834 escaños que se han repartido en Castilla y León desde 1983 hasta 2019, 753 han sido para PP (434) o PSOE (319). Otros 81 han sido para otras fuerzas, con especial relevancia para León, donde UPL ha hecho valer su implantación (ha logrado 12 de los 21 que fueron para otras formaciones). Valladolid, que reparte 15 puestos, o Burgos son las que permiten más diversidad. Ávila trampea sus resultados por la relevancia del CDS en las primeras legislaturas autónomicas.
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