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Calor en Castilla y León y en toda España más propio de julio que de abril. Calor que ha comenzado a llegar a partir de ... hoy, domingo, y que será progresivo a lo largo de la semana, con saltos hacia arriba desde el lunes al sábado 29. Un ascenso que alcanzará su pico el sábado, con 33 de máxima en Valladolid y 15 de mínima. Y que se situará también en los 33 en Palencia, con 11 de mínima, mientras que Segovia tendrá su cénit el jueves y el viernes con 29 de máxima y mínimas de 15 y 18 respectivamente, valores muy anómalos para la época del año, aunque a partir del domingo, los modelos indican que podrían comenzar a bajar los termómetros. En todo caso, a las lluvias no se las espera en lo que queda de abril, ni mil, ni siquiera cabiendo en un barril.
Hará calor, pero no será la primera ola de calor en España de 2023. Para que podamos hablar de este fenómeno tan repetido el año pasado se deben cumplir ciertos criterios. Una ola de calor, según establece la Agencia Española de Meteorología (Aemet) se define como un período excesivamente cálido en el cual las temperaturas máximas y mínimas superan, por lo menos durante 3 días consecutivos y en forma simultánea, ciertos valores que dependen de cada localidad. A pesar de que vayamos a tener temperaturas muy elevadas para la época la próxima semana, estos requisitos no se cumplirán.
¿Es normal esta situación de calor en abril? Estos calores no son normales, aunque sí hemos tenido entradas cálidas en otras ocasiones. Por ejemplo, en abril del 2011, un episodio de calor que provocó máximas elevadas en áreas del sureste peninsular, con 37.4ºC en Murcia. En abril de 1997, Sevilla registró su máxima de abril, con 35.4ºC.
La situación prevista para las próximas jornadas, no obstante, sería mucho más excepcional en toda España. A unos 1.500 metros de altitud, la temperatura alcanzará previsiblemente los 20 o 22 grados en muchas zonas, entre ellas, buena parte de Castilla y León. Esto sería varios grados por encima de los episodios anteriores, siendo además valores récord para las fechas en todo el territorio nacional.
Por días, para el martes 25 se esperan cielos velados por nubes altas en Castilla y León. Temperaturas mínimas con pocos cambios o en ligero ascenso; máximas en ascenso generalizado. Viento flojo de componente oeste.
El miércoles, continuarán los cielos velados por nubes altas. Temperaturas mínimas con pocos cambios y máximas en ascenso generalizado. Viento flojo variable durante las horas nocturnas.
Así, si el pico de la subida de los termómetros se alcanzará entre el viernes y el sábado, donde el mercurio se situará en máximas de 33 grados en Valladolid y en Palencia en las máximas -15 y 11 en las más bajas respectivamente- y de 29 en Segovia (con 18 de mínima), en el resto de la comunidad los registros máximos se mantendrán por encima de los 25 grados y alcanzando y traspasando los 30 en Salamanca, Burgos y Zamora.
El domingo, en pleno puente del 1 de mayo, el termómetro se situará en unos también altos para la época del año pero no tan extremos 25 grados. Tampoco parece que esta reducción de temperaturas máximas y mínimas –caerán a los 8 grados en Valladolid y Palencia y uno menos en Segovia– venga, de momento, acompañada de precipitaciones.
El episodio de altas temperaturas que afectará a Castilla y León hasta el sábado será especialmente intenso en el valle del Guadalquivir donde, por ejemplo, se esperan temperaturas de hasta 39 grados en Sevilla capital. Esta circunstancia -bautizada como horno ibérico por algunas webs especializadas como El Tiempo o por meteorólogos como Roberto Brasero- viene provocada, como relata Aemet, por la llegada de una masa de aire muy cálido y seco que proviene de África. Su presencia, unida a las condiciones de estabilidad atmosférica y de fuerte insolación, provocan este ascenso de las temperaturas hasta valores propios del verano.
El fin de los valores anormalmente altos en los termómetros llegará con toda probabilidad a última hora del sábado y especialmente el domingo, cuando entrará por el oeste de la península una masa de aire más humeda y fresca que podría dejar algunas tormentas en la mitad norte del país.
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