Sonia Hernando, en su tienda en la plaza de El Salvador, en Valladolid.. G. Villamil

Desde Bruselas a Valladolid para abrir una tienda de ropa ecológica

La alerta sanitaria aplazó la inauguración del comercio de Sonia Hernando con los talleres de reciclaje. El pasado 9 de junio recibió a los primeros clientes

Jesús Bombín

Valladolid

Sábado, 27 de junio 2020, 09:04

En unas semanas hará un año que la barcelonesa Sonia Hernando apuntó un lugar en el mapa de España y eligió Valladolid. Atrás quedaron quince ... años de vida en Bruselas, donde trabajaba en el área de márquetin de Toyota. Hizo las maletas y recaló en la ciudad castellana junto a su marido –portugués de Oporto y consultor también en la firma automovilística, para la que sigue viajando a la capital europea– y sus dos hijos de 3 y 7 años. «Echábamos de menos el sur de Europa y deseábamos volver; la idea era buscar un sitio que nos gustara, bien comunicado porque mi marido tiene que viajar mucho, así que buscando ciudades y pensamos que Valladolid sería un lugar fantástico, a solo una hora de Madrid y con un estilo de vida que nos gustaba para nuestros hijos», cuenta esta emprendedora de 46 años, que nunca antes había pisado la ciudad. «Vimos que en el mercado faltaba la opciòn de productos ecológicamente sostenibles, así que nos dimos un plazo de tres meses para hacer un estudio de mercado, conocer a fondo la ciudad y en octubre tomamos la decisión en serio». La decisión fue poner en marcha MiGiraluna, una tienda taller en el local que hasta hace unos meses ocupó una agencia de viajes en la calle Emilio Castelar, junto a la plaza del Salvador.

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En la venta de ropa infantl sostenible, juguetes didácticos de madera y talleres creativos se sustenta esta intrépida aventura comercial, con venta presencial y a través de la web www.migiraluna.es.

«Durante muchos años nos faltó el coraje para embarcarnos en esto porque el camino implicaba sacrificios, así que al final tomamos una opción y pensamos abrir a mediados de marzo, pero nos pilló por medio el confinamiento», recuerda Sonia Hernando, confiada en que su propuesta cale entre los compradores. «El impacto de la ropa en el medio ambiente es cada vez mayor y de la necesidad de cambiar el rumbo nace MiGiraluna, una tienda taller donde además de encontrar ropa infantil ecológica la gente podrá participar en numerosos talleres creativos con un fuerte compromiso ambiental; estos primeros días la respuesta entre el público está siendo positiva, faltaba color en la ropa infantil y en la tienda apostamos mucho por los colores».

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