Secciones
Servicios
Destacamos
José AntonioDiez (León, 1968) es una voz incómoda porque habla de leonesismo desde el PSOE y eso saca el tema fuera de su contexto más minoritario, el de los partidos regionalistas, y lo lleva al primer plano.
-Estos días se hace mucha referencia al ... aniversario de aquella moción leonesista que impulsó en el Ayuntamiento.
-Si de algo me siento orgulloso es de haber iniciado ese movimiento. Que no es un inicio, porque esa reivindicación histórica de la región de León por tener su propio autogobierno lleva vigente desde el año 1983. Me siento orgulloso de reavivar esa llama que estaba latente y que parecía que había quedado dormida durante tanto tiempo. A pesar de la pandemia, que llega casi en ese momento, son ya más de 50 municipios y casi el 50% de la población de la provincia los que ya han visto cómo se respalda esa moción. No hace más que transmitir lo que es un sentimiento general de todos los leoneses. Esa falta de pertenencia o esa desafección hacia esta comunidad autónoma que se constituyó en su momento contra la voluntad de los leoneses, contra la voluntad y el cumplimiento de la propia Constitución. Y es un momento en el que, con pasos lentos, va a ser un camino inexorable. Nadie lo va a poder cambiar. Las posibilidades legales son todas. León nunca debió estar con Castilla por razones de toda índole. Pero cuando haces un análisis de estos 40 años, todavía te cargas con muchísimas más. Castilla y León se ha quedado en un centralismo exacerbado y la región leonesa se ha visto duramente agraviada. Tenemos argumentos legales y económicos y sociales que demuestran que esta autonomía, para la región leonesa, ha sido una debacle y un auténtico fiasco y lo que queremos es tener autogobierno y poder tomar nuestras propias decisiones.
-¿Cómo encaja su discurso dentro del PSOE? Tenía intención de hablar en su momento con la ministra de Ordenación Territorial, Carolina Darias.
-Intenté hablar varias veces con Carolina y no fui capaz. Le envié cinco cartas y no me contestó ninguna. En cambio con el relevo en el Ministerio, la situación ha cambiado radicalmente. Le envié una carta a Miquel Iceta y me contestó. Y en cuanto sea posible tendré una reunión con el secretario de Estado, no con el ministro, pero bueno. Hay que ir dando pasos. Es el número dos del Ministerio y se trata de darle traslado de la situación de la región leonesa. Es verdad que Iceta contestó en cierta ocasión que el Gobierno no podía hacer nada, pero no es cierto, pero la Constitución habla de que el Gobierno puede tomar la iniciativa legislativa para poder realizar una iniciativa autonómica de este tipo. En mi partido es cierto que esto no se entiende muy bien. Puedo entender que en Madrid no se comprenda. Está muy lejos y durante casi 40 años se ha intentado borrar la historia y sentimiento de esta tierra. La comunidad autónoma se ha gastado un montón de millones de euros en hacer un invento de «Castilla y León». Cuando nunca ha sido así. León era un reino histórico mucho antes que Castilla. Y se ha gastado mucho dinero en intentar borrar nuestra identidad. Desde las propias Cortes de Castilla y León. En educación, los propios libros de texto son sonrojantes. Puedo entender que en Castilla, en Valladolid, mi partido no comprenda algunas cuestiones. Pero donde me cuesta mucho entender es que mi partido en esta provincia no se sume al 100% a esta iniciativa. Porque si algo tienen los leoneses es este sentimiento y no estar en la línea que ellos te marcan es no estar con los ciudadanos, y eso en las urnas se acaba pagando. De lo que estamos orgullosos es de que este tema vuelva a estar en la agenda de León y de toda España. Se ha conseguido que se hable de León y de su derecho a la autonomía. Algunos con mala intención, hablando de que queremos la independencia.
-Hay algunos clichés, como eso del «independentismo leonés». Y Luis Mariano Santos, de UPL, nos decía hace algunos meses que nada tiene que ver el autonomismo con el independentismo.
-Que este movimiento haya comenzado en este Ayuntamiento, con un alcalde socialista, te rompe un poco los esquemas. Pero es de aquellos que están fuera y no lo entienden. Porque este movimiento es transversal, no es político. La cantidad de ciudadanos y cargos públicos del PP que me animan a seguir, y por supuesto del PSOE… Es un sentimiento de la ciudadanía, del pueblo de León. Independientemente de que luego cada uno tenga su ideología. Y al ser transversal, es imparable.
-¿Le ha hecho daño Cataluña, por esa analogía?
-El momento en el que surge era el momento en que el Gobierno central estaba con negociaciones para conformar Gobierno y existen unas presiones nacionalistas e independentistas catalanas, y mucha gente trató de buscar ese símil. Pero esto también nos permitió una mayor visibilización. Como alcalde pude estar presente en todas las televisiones y radios nacionales e incluso internacionales. Costaba mucho hacer entender que no tenemos nada que ver con Cataluña y con lo que Cataluña pide. Pero sí nos dio oportunidad de tener mayor difusión de nuestras reivindicaciones y demandas históricas y constitucionales.
-Al mismo tiempo es un momento clave para reconstruir el país con los fondos europeos. Es otra de las claves. Mucho más tiene que reconstruirse una comunidad como esta.
-Esos fondos europeos tienen mucha importancia, pero más aún en esta mal llamada España vaciada, en la que Castilla y León prácticamente tiene el liderazgo junto a Extremadura y Galicia y Asturias. Toda esta parte occidental tiene una gran lacra en cuanto a pérdida de población, actividad económica y riqueza. Ahí es donde hay que ver la apuesta del Gobierno central y los impulsos de los gobiernos autonómicos para que se desarrollen proyectos en estos territorios. Porque Castilla y León es muy extensa y las nueve provincias no parten en la misma situación, ni parecida. ¿Se van a centrar en las zonas deprimidas o van a seguir con ese centralismo exacerbado que ha mostrado esta comunidad autónoma con el eje Valladolid-Palencia-Burgos? Si vemos que los proyectos importantes de desarrollo se acaban yendo a Cataluña, País Vasco, Madrid… Iremos teniendo más de lo mismo. Son una enorme oportunidad de vertebrar este país que se ha quedado desmembrado como consecuencia de centralismos exacerbados. Antes era Madrid, pero ahora hay 18 centralismos. Castilla y León tiene el suyo, y Andalucía, y Aragón… Debe haber una discriminación positiva en estos territorios. No me vale que a Castilla y León vengan los millones que correspondan, porque esos iban a venir de todas maneras. Debe llegar algo extraordinario, algo especial que de verdad lleve a creer que hay una apuesta por este territorio.
-El alcalde de Soria, Carlos Martínez, nos dijo lo mismo sobre esa discriminación positiva necesaria. Pero la primera fábrica de baterías va para Cataluña.
-Los primeros grandes proyectos ya están ubicados en País Vasco y Cataluña. Y eso provoca la desesperación de los ciudadanos. Porque todo se sigue llevando a los mismos sitios. Y no se piensa tanto en el ciudadano sino solo en la política. Si los ciudadanos de mi ciudad y de mi provincia ven que pasan estos fondos como Bienvenido míster Marshall, ¿qué pueden pensar? Que nos han abandonado y que están esperando a que nos despoblemos del todo y que nos vayamos todos a vivir a Madrid y a Valladolid.
-Uno de los debates en las Cortes que molestó a Fernández Mañueco se lo planteó dos veces su socio de Gobierno, Ciudadanos, sobre el Corredor Atlántico.
-Recuerdo que Europa sacó un proyecto, Conecta Europa, con muchos millones para financiación de infraestructuras de la economía del transporte, nudos logísticos, etc. Y en León se demandaba el desarrollo del Polígono Intermodal de Torneros. La Junta nunca aceptó la propuesta, sino que decidió apostar por Salamanca, Burgos y Valladolid, todos denegados por la Unión Europea. Porque resulta que Torneros venía incluido en el proyecto europeo como nudo principal de la red básica de transporte europeo, pero la Junta lo omitió. Porque lleva muchos años, con el ex consejero de Fomento y ex alcalde de esta ciudad, Antonio Silván, a la cabeza, desplazando el eje logístico hacia el sur. No querían que el eje logístico del noroeste peninsular fuera León. Eso ha llevado a perder muchísimas oportunidades. Con lo cual, el PP de Castilla y León nunca ha apostado por el Corredor Atlántico. Y tiene si cabe tanta o más importancia que el Corredor Mediterráneo. Es una conexión desde el punto de vista de la mercancía industrial casi más importante que la del Mediterráneo. Es la apertura de todo nuestro país a todo el occidente y todo el norte.
-¿Cambiaría algo si prospera esa moción de censura planteada por el PSOE?
-Esa moción realmente la presentaron los ciudadanos en las elecciones de 2019. Nos encontramos con un partido trilero, que es Ciudadanos. Que hoy dice blanco y mañana negro y no se ponen colorados por nada. Y decidieron pactar con el que estaba a cambio de ayuntamientos, diputaciones… Algo nunca visto en la política de este país. El cambio es necesario en esta comunidad autónoma, pero debería haberse producido hace ya dos años. Insisto en mi mensaje. A los leoneses nos parece muy bien pero queremos nuestro propio autogobierno. Será mucho mejor Castilla con un presidente del Gobierno socialista, no me cabe duda. Pero los leoneses queremos nuestro propio Gobierno.
-Con el leonesismo siempre cabe plantearse dos cosas. Por un lado, Ponferrada y El Bierzo. Por el otro, León y Salamanca.
-Cuando se entrevista a políticos de uno y otro lado en Zamora y Salamanca se escuchan las mismas declaraciones casi que aquí cuando se entrevista a políticos de un lado y de otro: el dictado de sus amos. Pero ese no es el sentir del pueblo. Y respecto a El Bierzo, es una parte fundamental de esta provincia y por tanto de la región leonesa. Entiendo que se hayan sentido ninguneados, aunque ahora ha llegado Mañueco y les ha dado cuatro duros para el Consejo Comarcal y están muy contentos. Lo han planteado para intentar dividir un poco. Eso no es lo que quiere el pueblo, lo que quiere El Bierzo, que siempre ha sido y será parte fundamental de ese proyecto autonómico que debe ser la región leonesa. En ningún caso estará tan ninguneado como lo ha estado en estos cuarenta años. Nosotros abogamos por una comunidad autónoma diferente a la que existe. Las comunidades autónomas han fracasado por esos centralismos. Deben ser descentralizadas, debe haber distintos centros de poder orgánico, ejecutivo, político. Zamora, Salamanca, León, El Bierzo, deben tener su peso. Todos debemos estar a gusto en una comunidad autónoma, si no es imposible llevarla a cabo.
-Siempre se habla de que Castilla y León es la comunidad autónoma más extensa de Europa y eso también complica todo.
-Complica por su extensión, por su baja densidad demográfica, y dificulta todavía más que se creó un engendro imposible con dos territorios con identidades completamente diferentes, León y Castilla. Quien lo quiera entender, que lo entienda. Y quien no, estará equivocado. Esto está abocado a que en el futuro acabe llevándose a cabo.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.