Asaja, COAG y UPA saldrán a la calle ante los costes que hacen «inviable» la siembra de cereal

La manifestación arrancará a las 11,30 horas a las puertas de la Delegación del Gobierno en Castilla y León, y finalizará a las puertas de la Consejería de Agricultura y Ganadería de la Junta.

El presidente de Asaja Castilla y León, Donaciano Dujo, resaltó que mientras el gasóleo se ha duplicado, el precio de los abonos se ha multiplicado por cuatro y por seis el de la electricidad, a la vez que explicó que mientras el precio de los alimentos registra una subida media del 14%, los costes de producción en el sector acumulan un incremento entre el 300 y 400%.

En este sentido, hizo un llamamiento a la sociedad para que no criminalice al sector de las subidas de precios, cuando la realidad es que agricultores y ganaderos se están empobreciendo.

Por su parte, el secretario general de UPA, Aurelio González, aseguró que la «salvación» del sector pasa por un plan de choque que contemple ayudas directas y bonificaciones fiscales, así como el cumplimiento del Ley de Cadena Alimentaria, en el que se deben implicar tanto el Gobierno central como por la Junta de Castilla y León.

En este sentido y según recoge la agencia Ical, reclamó ayudas directas por hectárea sembrada y por cabeza de ganado y distintas rebajas fiscales entre las que destacó la exención del IBI de naturaleza rústica, la devolución total del Impuestos sobre Hidrocarburos o la supresión del IVA superreducido de determinados productos adquiridos por el sector.

A su vez, el secretario de UPA reclamó la publicación oficial de los costes de producción para que los agricultores y ganaderos puedan referenciar adecuadamente sus contratos con la industria, así como un control de las importaciones para evitar la llegada de productos que no se cultivan con las mismas exigencias que dentro de la UE.

Por su parte, el secretario de COAG Castilla y León, Lorenzo Rivera, recordó que el lema de la manifestación será: «Si el campo no produce, la ciudad no podrá comer», reclamó a las autoridades un control de la especulación y la necesidad de poner en marcha ayudas directas. Así, recordó que mientras en la crisis generada por la pandemia los ERTE costaron a las arcas públicas 20.000 millones de euros, y la banca se llevó otros 60.000 euros en ayudas durante la crisis de 2008, «la situación límite que el vive ahora el campo hace necesario contar con ayudas directas».

Al mismo tiempo, explicó que la crisis de rentabilidad es lo que ha provocado que desde finales de febrero 170 explotaciones de vacuno hayan cerrado en Castilla y León desde febrero de 2020, y lamentó que en medio de este «complejo» panorama lleva una reforma de la PAC «injusta» para el profesional y que «no ayuda a producir alimentos».

Otras de las reivindicaciones que planteó Rivera fue la necesidad de establecer la doble tarificación eléctrica, un incremento de las subvenciones a los seguros agrarios y el mantenimiento de avales para préstamos.

Por último, Donaciano Dujo cifró en mil millones de euros la cantidad de ayuda que necesita el sector en la comunidad si se pretende que la sementera de cereales de secano se haga en unas condiciones normales.