
Secciones
Servicios
Destacamos
El desencuentro PP-Vox vive las horas cruciales. A falta de hora y media para la constitución de las Cortes, los representantes de Vox, Juan García Gallardo y David Hierro entraban en el despacho de Alfonso Fernández Mañueco en el parlamento autonómico para intentar desbloquear la situación y llegar a un acuerdo. El Partido Popular aún no ha desvelado si quiera quién será su candidato a presidir las Cortes, pendiente de lo que pueda ocurrir en esta negociación que se celebra 'in extremis'.
A mediodía de este jueves se constituyen las Cortes de Castilla y León y el ambiente ya es tenso. Más aún después de las declaraciones de Santiago Abascal en Madrid, un aviso sin paliativos: «En estas condiciones, nos veremos abocados a votar a nuestros candidatos en las Cortes y no podremos apoyar una investidura [de Alfonso Fernández Mañueco]». Las condiciones a las que se refiere son, entiende, «justas y proporcionales», y se resumen en la petición de presidir la Mesa de las Cortes, junto a una secretaría, tener la Vicepresidencia de la Junta y tres consejerías. Luego desgranan un programa de Gobierno y una serie de acciones a realizar en los primeros noventa días y es ahí donde admiten alguna negociación más, conscientes de que es el PP quien tiene los 31 escaños y eso le habilita para marcar la línea de acción.
«El PP está haciendo de menos a Vox y a sus votantes», añadió Abascal, que insistió en que el límite de la negociación estuvo claro desde el principio. «No íbamos a admitir un trato diferenciado al dado a otras fuerzas políticas con una parecida representación», señaló.
Contenidos relacionados
En esta tesitura, lo que está en juego hoy en las Cortes es mucho más amplio que la constitución del hemiciclo y de la Mesa, habitualmente un trámite. Si no hay un acuerdo al límite, quien presida las Cortes será una anécdota, recaiga en el PP o en el PSOE. Porque en vista de la situación, esto tampoco está claro. Los procuradores de Soria ¡Ya!, que llegaban al filo de las 9:30 al parlamento autonómico, aún no se han pronunciado sobre el sentido de su voto y esperan acontecimientos después de haber hablado con unos y otros. Con Vox apoyando a su propio candidato y el PSOE y Unidas Podemos a la socialista Ana Sánchez, lo que hagan los sorianos puede resultar determinante.
Lo que ocurre es que el órdago de Vox bloquea lo que vaya a ocurrir posteriormente. El presidente de las Cortes hablará con los grupos y propondrá un candidato a formar Gobierno, en este caso Alfonso Fernández Mañueco (PP) en un plazo de quince días. Si no sale elegido, y no lo haría si Vox y PSOE votan en contra, se abriría un plazo de dos meses para lograr una investidura positiva. Vox también dejó claro antes de la campaña y durante ella que no permitiría un Gobierno de izquierdas. Esto es, que tampoco habría posibilidad de un giro favorable al PSOE mientras no hubiera abstención del PP. Y no habría Gobierno del PP sin abstención de los socialistas.
El bloqueo conduce a una repetición electoral que llegaría en verano.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.