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Usuarios de Salud Mental Burgos, en un curso de formación de auxiliar de pequeño comercio
Pequeñas conquistas de calidad de vida

Pequeñas conquistas de calidad de vida

Alicia Pérez

Miércoles, 10 de mayo 2017, 17:23

En Salud Mental Burgos lo importante es que cada usuario consiga calidad de vida, pequeñas conquistas de calidad de vida. Lo importante es que la persona esté bien, sea feliz en la medida de lo posible y busque su propio camino. Con este gran objetivo de ser felices, estar a gusto, y seguir caminando en la vida, trabaja la Asociación Pro Salud Mental de Burgos (Prosame), creada en 1990 por familiares de personas con enfermedad mental e impulsada también por trabajadores sociales, psicólogos y psiquiatras de la provincia. Consigue la entidad con los programas y servicios que presta fomentar las relaciones sociales de los usuarios y estabilizar la enfermedad, según explica la psicóloga y directora técnica de Salud Mental Burgos, Conchi Martín Antolín.

Con 26 años de historia, la asociación nació con el espíritu de reivindicar la creación de recursos públicos para las personas con problemas de salud mental. Apostaron por el tratamiento comunitario y la rehabilitación psicosocial. Son fines también de la asociación la defensa de los derechos de las personas con enfermedad mental, así como su rehabilitación e integración social y laboral. Además, se plantea el reto de conseguir la igualdad real del colectivo.

En la actualidad, la entidad tiene 350 asociados y trabaja a diario con unos 200 usuarios tanto de Burgos como de la provincia. Uno de sus principales pilares son los centros de día y ocupacionales, en los que se realizan actividades de promoción de la autonomía personal, rehabilitación psicosocial y actividades terapéuticas y ocupacionales. Estas últimas buscan que los usuarios puedan trabajar e incorporarse al ámbito laboral.

Centra sus esfuerzos también la entidad en el área residencial, con viviendas supervisadas en las que residen personas con una supervisión. Otro de los servicios es el de atención domiciliaria, dirigido a aquellos usuarios que viven solos o que tienen dificultades y a los que se apoya en su propio hogar en temas de medicación y de autonomía personal. El objetivo en este sentido es que la persona pueda vivir bien sin tener que salir de su ámbito o de su comunidad.

Cuenta Salud Mental Burgos además con área de empleo, con profesionales dedicados a hacer prospección empresarial y con servicio de bolsa de empleo e itinerarios personalizados.

De manera transversal, se trabaja en actividades de ocio y con las familias. Para los más allegados a las personas con problemas de salud mental, estos servicios suponen tranquilidad y un apoyo importante en el día a día, según explica la directora, ya que hay profesionales que acompañan y aconsejan a los usuarios.

Cuenta la asociación con una delegación en Merindades, en la zona norte de Burgos, donde hay un centro de día, una vivienda tutelada y se trabajan temas de empleo.

«La mejoría de los usuarios es muy grande», asegura Conchi Martín sobre los efectos de la labor que realiza la asociación. Esta mejoría se refleja, sobre todo, según destaca, en una mayor estabilidad de la enfermedad, con menos recaídas o estas son más leves. A esto se suman los beneficios a nivel social, ya que la enfermedad mental provoca muchas veces aislamiento social por el problema del estigma que la rodea. Los servicios de la asociación se convierten así para sus usuarios en un lugar en el que hay otras personas con las que tienen que relacionarse y poner en práctica sus habilidades sociales, en definitiva, en una forma de salir de sí mismos.

«El síntoma se socializa de alguna manera y está mejor visto porque es un entorno donde si hay algún problema, se dice en voz alta y la gente también apoya y echa una mano», destaca la directora sobre la relación entre los usuarios.

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