Muslos de pollo al horno en treinta minutos

En este caso, para preparar unos jugosos muslos de pollo la propuesta pasa por hornearlo con una selección de verduras al gusto. Para evitar que se sequen, uno de los trucos más populares es pasar los muslos previamente por la sartén con un poco de harina para sellar la carne. Se salpimentan y se añade un chorrito de aceite y se hornean durante un cuarto de hora.

Por otro lado, una vez cortado en rodajas el calabacín, tomate, zanahoria o los pimientos (rojo o verde), también se condimentan con sal y pimienta, además de añadir alguna aromática como el tomillo. Se añaden al pollo y de nuevo un chorrito de aceite y al horno un cuarto de hora más. Si al comprobar la carne está con un tono rosado se dejará cinco o diez minutos más.

Por último, antes de servir se riega con un majado elaborado con ajo y perejil machacados en un mortero y un buen chorro de aceite de oliva. Además, si se busca una textura más crujiente se le pueden añadir unas almendras trituradas.

Cabe recordar que es aconsejable el consumo de tres raciones de carnes magras a la semana alternando distintas opciones, entre las que está, por supuesto, el pollo.