De tapas y pinchos por Valladolid

Un menú del día de comida casera en el corazón del polígono de Argales

En pleno corazón del polígono de Argales se encuentra La Forja, un restaurante que lleva funcionando más de 30 años, alimentando a trabajadores, viajeros y vallisoletanos que conocen los entresijos de la ciudad y saben dónde se puede comer bien.

El local, situado en la Calle de la Forja, cuenta con dos plantas: la baja, donde una barra en forma de 'U' sujeta los codos de los trabajadores que aprovechan su descanso para tomar un café, y la de arriba, donde se localiza un amplio comedor con una gran luminosidad.

Los gerentes son dos hermanos, Jesús y José, que desde los inicios sirven comida casera a cualquier trabajador que se acercase a su local, aunque reconocen que desde la covid-19, la afluencia de gente se ha visto mermada. «Han cambiado los horarios de trabajo, hay más jornadas continuas y menos partidas, entonces, se acercan menos trabajadores porque comen en casa».

Aún así, su negocio, abierto de lunes a viernes, presume de llevar tres décadas ofreciendo comida casera, desde el primero hasta el postre. «Todo es casero, y todos los días cambiamos el menú, intentando mantener la variedad».

El menú, cuenta con tres primeros a elegir, seguidos de otros tres segundos y postre o café, a gusto del consumidor, además de las bebida, por supuesto. Su intención, nos comentan, «es seguir siendo sencillos, hacer platos que todo el mundo pueda comer en su casa.» Y vaya si lo consiguen.

El ambiente acogedor y el trato cercano acompañan a la comida, haciendo de este establecimiento una auténtica delicia, aunque sin duda, uno de sus platos fuertes es el precio: 13 euros. Una cantidad que apenas se ha movido, a pesar de la subida generalizada de precios.

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