La Policía Local de Burgos contará en 2018 con un nuevo radar móvil

Una vez llegue a la Policía el nuevo cinemómetro, se retirará el actual, el cual ha venido funcionando durante las dos últimas décadas como complemento de los radares fijos repartidos por la ciudad. Unos radares que, en lo que va de año, han incrementado significativamente el número de sanciones.

Así, en 2016 se tramitaron 1.974 infracciones, mientras que en lo que va de 2017 se han tramitado 2.815. En este sentido, desde la Policía se achaca este significativo incremento a los problemas técnicos que se registraron en los radares fijos en 2016. Y es que, durante varios meses, uno de los dos aparatos que están en rotación en las seis cabinas repartidas por el casco urbano, estuvo estropeado y no pudo prestar servicio.

Esa circunstancia condiciona una estadística que, eso sí, también demuestra que sólo el 0,12 por ciento de los vehículos controlados fue sorprendido circulando por encima de la velocidad permitida, una estadística que se ve incrementada en el caso del radar móvil, que en 2016 sirvió para interponer 1.029 sanciones (un 1,94 por ciento). En lo que va de año, este último radar ya ha ‘cazado’ a 626 conductores.