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Pablo de Rojas Sánchez-Franco no era un completo desconocido, pero ahora el 'obispo' excomulgado en 2019 por el exprelado de Bilbao Mario Iceta está de plena actualidad. ¿El motivo? La drástica decisión de quince monjas de Orduña, que han decidido guardarle fidelidad y, con ... ello, romper con el Papa y la Iglesia católica. Una operación inmobiliaria está detrás de su cisma que ha convulsionado a la localidad vizcaína y a la burgalesa de Belorado.
Y es que las posesiones terrenales también parecen importantes para este religioso procedente de Jaén, ya que no duda en difundir sus datos bancarios en Instagram a través de la cuenta oficial de la organización religiosa fundada por él mismo en 2005. Su objetivo soterrado es captar generosas donaciones que le permitan poder mantener un ritmo de vida propio de un príncipe de la Iglesia, mientras expresa su admiración por Franco o José María Escrivá de Balaguer. Así lo recoge una información de El Correo.
Las monjas acusan a sus superiores de no querer concederles «licencia de venta del convento de Derio», que es de su propiedad y está valorado en unos tres millones de euros. Al mismo tiempo, critican que no se les permita «cumplir con los pagos» del monasterio de Orduña, que quieren adquirir a las hermanas de Vitoria para trasladarse desde la localidad burgalesa de Belorado, donde se encuentran en la actualidad. «Nos llamarán herejes, cismáticas y locas y muchas cosas más, muy calumniosas y desagradables. No los creáis, al menos por esta vez, que no os engañen», aseguran en un extenso manifiesto de 70 páginas.
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Eso sí, no deja de ser curioso que su nuevo protector, un religioso tan tradicionalista que reniega de Concilio Vaticano II y oficia las misas de espaldas y en latín, utilice las modernas redes sociales para darse a conocer y, de paso, recaudar dinero para su organización, que define como una «suerte de milicia guerrera predestinada a sobresalir sobre todo lo existente» y dedicada a promover «obras de culto, caridad y piedad». Con más de 500 publicaciones y casi 3.300 seguidores, su «Ilma. Rvdma. Sr. Dr. D. Pablo de Rojas Sánchez-Franco, obispo por la Gracia de Dios y fundador de la Pía Unión de San Pablo Apóstol», sube fotos de su particular palacete episcopal, de sus reuniones con otros religiosos, además de sus quehaceres sacerdotales como impartir el sacramento del bautismo. Incluso se retrata orando en diferentes y píos lugares.
Pero tampoco duda en fotografiarse en otros sitios más terrenales como el hotel Ritz, aprovechando una estancia en Londres. Y siempre de punta en blanco, mejor dicho en morado, con un 'look' rescatado de la Iglesia preconciliar: sotana de cuello romano, bonete, esclavina, roquete, solideo, cruz pectoral de oro, zapatos negros con hebilla de plata... Un estilo demasiado retro teniendo en cuenta la edad de un hombre, que usa el plural mayestástico cuando habla de sí mismo, nacido en Linares en 1981 en el seno de una familia de joyeros dedicada también a la compra de inmuebles.
Eso sí, en la mayoría de las fotos se adjuntan la cuentas corrientes a nombre de la Pía Unión de San Pablo Apóstol, organización con sede en Bilbao de la que es fundador como bien recuerda en todas sus actualizaciones. «Por favor, en giros o transferencias bancarias indicar siempre el remitente. En España se pueden desgravar en la declaración de la renta. Damos las gracias por la generosidad que nos manifiestan nuestros benefactores», recuerda el 'obispo'. También pide marcar en la Declaración de la Renta con una X la casilla de actividades sociales que es «con las que nos beneficiamos cierta entidades como la nuestra». A la actual Iglesia, de la que reniega, ni mención. De hecho, la critica sin piedad en Instagram por su aperturismo y ruptura con las tradiciones católicas más arcaicas.
En su historial de fotos se pueden encontrar imágenes que arremeten contra la Constitución española por su laicismo junto a otras ensalzando a Francisco Franco y a su dictadura. Parece obsesionado por «nuestro invicto caudillo», tal y como lo define. Algo lógico teniendo en cuenta que su querido y añorado abuelo fue jefe provincial del Movimiento Nacional entre 1948 a 1955. El Opus Dei de sus inicios, antes de adaptarse al Concilio Vaticano II, es su segundo gran referente con varios vídeos dedicados a la figura de fundador, José María Escrivá de Balaguer. Pablo de Rojas Sánchez-Franco estudió en un colegio de esta organización religiosa, es doctor en Derecho y licenciado en Filosofía por la Uned.
«¡Christus Vincit!, Christus Regnat!, Christus imperat!», exclama en la mayoría de los mensajes 'su Católica Grandeza Episcopal', ordenado 'obispo' en 2006 por el exjesuita Derek Scheller, prelado del Palmar de Troya desde 1976, y posteriormente en 2010 por el obispo valenciano Ricardo Subirón, miembro de los lefebvrianos. De Rojas, adscrito a la corriente thucista, que toma su nombre del vietnamita Pierre Martin Ngo-Dinh-Thuc, no reconoce ningún papa desde Pío XII. Es más, considera que el trono del Vaticano está vacante desde 1958. Unos postulados que han sido aceptados por las 16 monjas de Orduña pese al reducido número de personas que abrazan esta corriente cismática.
Un honor que implica vivir de acuerdo a su alto cargo religioso. Pablo de Rojas, que se declaraba «monárquico de los Austrias», contaba en el momento de ser entrevistado por este periódico en 2008 con dos personas a su servicio: un mayordomo asiático que lucía un impecable chaqué y una doncella con cofia y delantal. Ambos, que parecían sacados de una novela de Sherlock Holmes, le cuidaban a cuerpo de rey en su casa del centro de Bilbao, de 300 metros cuadrados y de estilo tan recargado como grandilocuente.
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