Fallece un niño de un año ahogado por un hielo de plástico en la localidad burgalesa de Villarmero

Los padres del niño, al ver que no conseguían que expulsara el hielo, pidieron ayuda fuera de casa y uno de los vecinos y alcalde de la localidad, Juan Tomás Santiago, acudió en su auxilio. Santiago, que tiene formación de primeros auxilios, le realizó el masaje cardiaco y el boca a boca, mientras esperaban a los servicios sanitarios. Unos diez minutos más tarde, los profesionales consiguieron, con mucho esfuerzo, extraer la pieza que impedía la respiración del pequeño.

Aunque el niño respondía favorablemente poco a poco, inmediatamente fue trasladado con una UVI móvil al Hospital Universitario de Burgos (HUBU), situado a menos de nueve kilómetros. Allí los médicos trataron de que se recuperara del episodio de asfixia. Sin embargo, una hora más tarde, el pequeño falleció a consecuencia de esa prolongada falta de oxígeno.

La vecina localidad de Villarmero, del alfoz de Quintanadueñas, ha amanecido consternada por un hecho que deja rota a una familia que la semana pasada celebraba el primer cumpleaños de su único hijo. El propio Santiago ha reconocido que está «muy afectado», al igual que todo el municipio, porque se trata de un caso tristísimo en una localidad en la que no viven muchos niños y su asusencia se hará especialmente notable.