El temporal Filomena ha dejado Ávila cubierta con una capa de 20 cm de nieve. A pesar de que se pueda transitar por las principales vías de la ciudad, el Ayuntamiento de Ávila ha recomendado a los ciudadanos evitar los desplazamientos innecesarios. Desde el inicio de este episodio, los servicios municipales han esparcido un total de 158 toneladas de sal y, tras activar el Plan 2 de Nevadas, se han puesto en marcha a 120 trabajadores y más de 50 medios mecánicos para evitar, en la medida de lo posible, las negativas consecuencias del temporal. Más acostumbrados que otras ciudades a este tipo de nevadas, los abulenses no han tardado ni un minuto en salir a disfrutar de este fenómeno, ocupando la ladera de la muralla de cara al Centro de Exposiciones y Congresos 'Lienzo Norte'. Muchos han apostado por las tradicionales bolsas de plástico para lanzarse explanada abajo, otros han optado por trineos o palas, y los más profesionales no han dudado en desempolvar sus esquíes, para circular por las calles de la ciudad.
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Esta es la cara de la moneda de Filomena en Ávila, la cruz nos la encontramos en la carretera. En nuestra provincia, la Meseta de Ávila es el único territorio de Castilla y León que se encuentra en estado de emergencia según el 'Plan de Activación de Alertas por Fenómenos Adversos'. Las carreteras de la Moraña están coloreadas en rojo en el mapa, lo que significa que están cubiertas de nieve por completo , se prohíbe circular a vehículos articulados, camiones y autobuses, y el resto tendrá que continuar la marcha con cadenas o neumáticos de invierno a 30 km/h. En nivel naranja está el sistema central de la provincia y en amarillo la zona sur, donde se prohíbe la circulación de camiones, mientras que los turismos y autobuses no deben pasar de 60 km/h. El mal estado de las carreteras ha obligado a 150 transportistas a hacer noche en la localidad abulense de Arévalo. El subdelegado del Gobierno en Ávila, Arturo Barral, además de ir esta misma mañana a visitarles, ha solicitado la activación del protocolo para atender a estos 150 transportistas que se encuentran esta noche atrapados en la localidad abulense de Arévalo.
Subdelegación del Gobierno, Junta de Castilla y León, Ayuntamientos y Diputación Provincial, trabajan coordinados para combatir este temporal, ante el temor de que se repita lo ocurrido en 2018. No hay que remontarnos mucho, tan solo tres inviernos, para recordar lo que supuso la última gran nevada en Ávila. Lo más destacado de aquella borrasca fueron las imágenes de los más de 3.000 vehículos atrapados en la AP-6 toda la noche por la nieve.
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